Denunció que policías se llevaron de la comisaría su auto, que estaba secuestrado

Gustavo Ríos estuvo cerca de 30 horas sin saber adónde estaba su auto. El 6 de enero tuvo un accidente y el vehículo quedó secuestrado en la comisaría 6. Todos los días pasaba en colectivo por ahí y lo veía. “Tenía recelo porque al dejarlo, también tuve que entregar la llave”, expresó la víctima. Sin embargo, el lunes a la mañana le avisaron que no estaba. Y recién volvió a saber de su auto ayer, por la tarde.

“Mi papá pasó con el colectivo de la Línea 8 por la comisaría. Me avisó y nos fuimos de forma urgente, a ver qué pasaba. Cuando llegamos el comisario Claudio Lorca no tenía asentada la falta del auto pero me prometió investigar, me dijo que iba a aparecer. La verdad es que él se portó muy bien con nosotros, estuvo a nuestra disposición”, añadió Ríos.

Verano tras las rejas

El vehículo, un Peugeot 308, veraneó durante casi todo enero en la comisaría. El día de Reyes el padre del dueño tuvo un accidente en la avenida Ejército del Norte, cuando rozó a una motociclista que cayó al pavimento.

Ríos pasó tanto tiempo sin poder recuperar su automóvil por un problema de documentos. Lo compró usado y lo está pagando en cuotas, por eso asegura que todavía no le entregaron la totalidad de los papeles, sólo los estrictamente necesarios para que pudiera circular.

Informe por Facebook

Después de varias horas de búsqueda sin buenas noticias, a un familiar se le prendió la lamparita y publicaron la historia en la red social Facebook.

Al cabo de algunas horas, un vecino le contó que en un comentario de su estado aseguraban haber visto el auto. “Estaba a la vuelta de la comisaría. Fuimos y ahí seguía. Estaba bien, pero no quisimos tocar nada. Esto ya está en manos de la Justicia, yo puse una abogada”, explicó.

Para Ríos no hay dudas, a su auto lo sacó algún efectivo de la repartición: “Otra no queda. Quizás lo hicieron por una travesura o para irse de joda. Pero mirá si le pasaba algo al auto. Su laburo es cuidarnos. Pasamos un mal trago”.

Sufrimiento familiar

Sin embargo, después de toda la incertidumbre, a la víctima todavía le queda un motivo para agradecer: que el sufrimiento por el que pasó su familia no haya sido peor.

“Mi viejo tiene un marcapasos, mi mamá es una persona mayor. Les podría haber pasado algo. Te da mucha impotencia. Yo adquirí el auto con mucho sacrificio y no para que venga alguien a hacerme pasar este mal momento”, relató.

Palabra oficial

LA GACETA intentó obtener la declaración del comisario Lorca, a cargo de la dependencia en la que desapareció el auto, pero no pudo conseguirla. El efectivo explicó a este medio que por el momento no puede brindar entrevistas ya que el caso se encuentra en “pleno proceso investigativo”.