Rajoy declinó, por ahora, intentar ser elegido presidente

Rajoy declinó, por ahora, intentar ser elegido presidente

Convulsión por la composición del Congreso.

EN ESPERA. Rajoy, líder del PP, busca acuerdos para retener el poder. reuters EN ESPERA. Rajoy, líder del PP, busca acuerdos para retener el poder. reuters
23 Enero 2016
Madrid, ESPAÑA.- En las presidenciales más convulsionadas en casi 40 años de democracia, Mariano Rajoy declinó AYER intentar formar gobierno en España, momentáneamente, porque carece de los apoyos necesarios para ganar una votación de investidura. Sin embargo, el presidente en funciones no renuncia a su intención de mantenerse al frente del Ejecutivo.

“Mantengo mi candidatura a la presidencia del gobierno, pero todavía no tengo los apoyos”, dijo Rajoy en el Palacio de La Moncloa, en Madrid, tras reunirse con el rey Felipe VI.

En un primer momento, el líder del Partido Popular (PP) buscaba presentarse a la votación en el Congreso de los Diputados e intentar ganarse en el debate al Partido Socialista (PSOE), la segunda fuerza, ya fuera para una gran coalición que hasta ahora rechaza su líder, Pedro Sánchez, o para lograr su abstención, lo que le permitiría ganar en segunda vuelta.

La sorpresiva propuesta que lanzó el partido Podemos hizo dar un paso atrás al jefe del Ejecutivo en funciones. El mandatario asegura que es una retirada solo temporal, aunque una frase sonó enigmática: “No renuncio a nada”.

Pablo Iglesias (Podemos) esbozó un gobierno de izquierdas presidido por Sánchez (PSOE), con él como vicepresidente y en el que entre también Izquierda Unida (IU), la formación a la que más daño hizo el surgimiento de Podemos.

Las elecciones del 20 de diciembre dieron entrada en el Parlamento a los partidos emergentes Podemos y Ciudadanos, arrojando el Congreso de los Diputados más fragmentado en casi cuatro décadas de democracia, situando al país ante una situación sin precedentes y unas matemáticas complicadas para la formación del Ejecutivo.

De 350 diputados, el PP de Rajoy tiene 122; el PSOE, 90; Podemos cuenta con 69 y Ciudadanos con 40.

Felipe VI cerró hoy la ronda de consultas con las fuerzas parlamentarias que marca la Constitución para proponer candidato. Se reunió con Iglesias, Sánchez y Rajoy y en el encuentro con el líder conservador, le propuso nominarlo para la votación de investidura, pero él la declinó.

“No solo no tengo una mayoría de votos a favor, sino que tengo una mayoría absoluta acreditada de votos en contra”, dijo Rajoy, que solo puede contar con la abstención de Ciudadanos, dispuesto a favorecer con ella la gobernabilidad, frente al rechazo del resto.

El rey Felipe iniciará el miércoles que viene una nueva serie de reuniones. De ella podría salir la nominación de Sánchez o la de Rajoy, en caso que el líder conservador consiguiera ganarse a su rival socialista.

De continuar las consultas y sesiones del Congreso sin una resolución, se deberá llamar nuevamente a elecciones nacionales. (DPA)

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