Alperovich: “sería necio si dijera que lo sucedido no afectó”

“Se me aflojan las piernas. Estos son mis últimos días como gobernador”. Es jueves al mediodía y José Alperovich está parado sobre una tarima de madera polvorosa en el club “Villa de Alderetes”. Traga saliva tras el traspié emotivo y se acomoda el saco. Hace mucho calor. Comienza el discurso y pide a dirigentes que militen casa por casa para que Daniel Scioli sea presidente y él, senador. Esta vez ya no lo acompaña una multitud de dirigentes, pero sí su hija Sara. Durante esta semana, Alperovich hizo varias referencias, como la de las primeras líneas, al final de su mandato. En su entorno afirman que recién “está cayendo”. Y se nota. En paralelo, las versiones sobre la transición bullen: la mayoría apunta a que su sucesor, Juan Manzur, lo estaría dejando al margen y que él estaría molesto.

- ¿Cómo está su relación con Manzur?

- Impecable, ¿cómo va a estar? Este es un equipo, es un proyecto político.

Alperovich no tarda en responder. Sentado a su lado está Manzur, que sonríe por primera -y única- vez durante la entrevista que el mandatario dio a LA GACETA en su despacho de la Casa de Gobierno. Hace horas que relanzó su campaña y anunció la construcción de 3.000 viviendas y 1.000 módulos habitacionales “para que Manzur tenga un paquete de obras en ejecución al comenzar”.

- Días atrás mencionó que sus equipos y los de Manzur estaban trabajando en el traspaso de gestión ¿En qué puntos?

- En todo. En el Presupuesto 2016, por ejemplo, que se lo consensuó. También en los últimos proyectos de leyes que se enviaron a la Cámara. Todo para que no tenga problemas y comience su Gobierno tranquilo.

- ¿Le está dando consejos para el armado del próximo gabinete?

- No doy consejos, pero hablamos mucho. El gobernador será él, no yo. Se habla mucho (de las supuestas diferencias entre ambos), pero siempre hablamos. Hace 12 años que viene siendo ministro y vicegobernador. Siempre estuvo compenetrado en la gestión. Para nosotros es normal hablar de política. No nos escondemos nada y lo hacemos sin especulaciones.

- Expresó hace meses que quería ser un hombre de consulta para Manzur, ¿está siendo así?

- Siempre voy a buscar que sea mejor que yo. Voy a trabajar para eso. Estaré para lo que él necesite.

- ¿Hay funcionarios de su gestión que se sienten desplazados?

- Creo que Manzur tiene que armar un nuevo gabinete y poner gente suya. Tiene la obligación de hacerlo. Cuando yo termino, cesan los mandatos de todos los ministros y funcionarios. Y ellos lo saben. Juan Manzur tiene que poner su gente, no es una cosa rara. Aquí nadie tiene que estar pegado al cargo ni se tiene que sentir mal. Esto no es una fuente de colocación de trabajo.

- ¿Cómo está encarando su campaña?

- Trabajando. Nuestra mejor campaña es hacer cosas. Ahora tomamos la modalidad de, cuando vamos a inaugurar una obra, hablamos después con dirigentes. Porque lo que nosotros pensamos es que Juan Manzur necesita un presidente que sea del mismo signo político. Estamos trabajando fuerte para que Scioli haga una buena elección.

- ¿Siente que ese día será un “plebiscito” a su gestión?

- Creo que me vengo plebiscitando hace 12 años. Rendimos cuentas cada dos años.

- ¿Qué proyectos tiene para el Senado?

- Lo que tendré como la Biblia es la carta compromiso que firmó Daniel Scioli con Tucumán. Para mí, si logramos que se concrete todo eso, es importantísimo. Será mi eje: azúcar, multimodal de cargas y ferrocarril. Como senador defenderé a Tucumán.

- ¿Cree que los sucesos políticos tras las elecciones provinciales afectarán su campaña?

- Creo que sí, puede afectar. Sería necio si dijera que no. Como siempre repetí, se armó una gran mentira. La gente sabe que por 110.000 votos (de diferencia que Manzur le sacó al radical José Cano) no puede haber fraude.



- ¿Considera que obtendrá un resultado muy diferente al de las PASO del 9 de agosto?

- Hay que esperar. Pero que estos sucesos afectaron, afectaron.

- ¿Qué les está pidiendo a sus dirigentes en los actos?

- Nosotros vamos a trabajar fuerte para que Manzur sea mejor gobernador que yo. Les pido que lo apoyen fuerte y que necesitamos que sea electo un presidente de nuestro partido. Faltan muchas cosas por hacer y necesitamos que la Nación nos siga ayudando. Es el mismo discurso que les estamos bajando a todos. Creemos que mucho más fácil le será a Manzur hacer cosas y ayudar si en la Nación hay alguien de nuestro espacio.

- En los actos en el interior pidió que cesen las internas, porque en algunas ciudades no ganaron los candidatos del oficialismo ¿Siente que hay rispideces?

- Es momento de que el peronismo esté unido. Hace unos días con Manzur tuvimos una cena con los intendentes y se dio el mismo discurso. El objetivo es que el 25 nos acompañen.

- ¿Los resultados de las elecciones provinciales en el interior fueron los que esperaba? ¿No creía que serían electos más dirigentes de las listas oficiales?

- No. No me sorprendió ninguna ciudad. Ganamos en 15 municipios y eso no es cualquier cosa. Perdimos cuatro y eso estaba dentro de las mediciones.

- ¿Qué hará el 30 de octubre?

- Voy a seguir trabajando en mis empresas, lo voy a acompañar a Juan en lo que pueda y trabajaré en el Senado. No me quedaré quieto. Capaz que me tomo unos días de vacaciones. Es imposible prepararse. No me dan tiempo para que me prepare. Estoy trabajando a lo loco, a full. Pero sí me voy a sentir raro. De un día para el otro, pasaré de tener la adrenalina y la cabeza a mil kilómetros por hora a no tenerla.

- ¿Pensó en recurrir a un profesional o a políticos que hayan tenido la experiencia para que lo ayuden a sobrellevar el pasar al llano?

- No, no. Es un problema que tengo que resolver yo. Voy a seguir trabajando y ayudando. Lo seguiré acompañando a Juan en las salidas. La vida sigue.

- ¿ Ya están organizando los actos de paso de mando?

- Todavía no. Falta, falta.