16 Septiembre 2015
GABRIEL ALPEROVICH. ARCHIVO LA GACETA
Son varias declaraciones que hablan de “Los hijos del poder”, aunque todas varían las circunstancias del lugar y el rol que tuvieron los distintos protagonistas. Pero el juez de Instrucción Víctor Manuel Pérez consideró que los testimonios que hay en la causa “impiden arribar al grado de certeza necesaria para el dictado del sobreseimiento” de Gabriel Alperovich y Sergio Kaleñuk.
El fiscal de Instrucción Diego López Ávila había solicitado el sobreseimiento del hijo del gobernador José Alperovich y del hijo de su secretario privado Alberto Kaleñuk, por el delito de encubrimiento. De esa manera, si surge alguna nueva pista aún podrían ser investigados por el homicidio. Pero el magistrado enumeró distintos testimonios para sostener su rechazo: fiestas en Raco o en El Cadillal, en las que Paulina murió al caer de una mesa en la que estaba bailando.
López Ávila había descartado estas hipótesis porque la autopsia había arrojado que Paulina murió por estrangulamiento manual, y no por una caída. Además, en todas esas hipótesis la actividad de “los hijos del poder” (se nombra a distintas personas, según quién dé la versión) es posterior a la muerte. Por ello es que sólo pidió el sobreseimiento por encubrimiento.
El juez también rechazó, por lo tanto, el sobreseimiento de Luis Daniel Olivera (encargado de un camping en El Cadillal donde habría ocurrido la fiesta de una de las hipótesis) y de Maximiliano Gallardo, quien estuvo detenido porque una línea telefónica que estaba a su nombre se usó en el teléfono de Paulina. Pero una pericia caligráfica habría demostrado que le habían falsificado la firma en la solicitud del teléfono celular.
De todas maneras, la discrepancia del juez con el pedido de sobreseimiento de López Ávila deberá ser resuelta por el fiscal de Cámara de Apelaciones. Aún se desconoce quién intervendrá en el expediente, ya que el titular de esa fiscalía es Alejandro Noguera, el primer investigador que tuvo el homicidio de Paulina y que fue apartado de la causa por una polémica foto en la casa de Alperovich.
El fiscal de Instrucción Diego López Ávila había solicitado el sobreseimiento del hijo del gobernador José Alperovich y del hijo de su secretario privado Alberto Kaleñuk, por el delito de encubrimiento. De esa manera, si surge alguna nueva pista aún podrían ser investigados por el homicidio. Pero el magistrado enumeró distintos testimonios para sostener su rechazo: fiestas en Raco o en El Cadillal, en las que Paulina murió al caer de una mesa en la que estaba bailando.
López Ávila había descartado estas hipótesis porque la autopsia había arrojado que Paulina murió por estrangulamiento manual, y no por una caída. Además, en todas esas hipótesis la actividad de “los hijos del poder” (se nombra a distintas personas, según quién dé la versión) es posterior a la muerte. Por ello es que sólo pidió el sobreseimiento por encubrimiento.
El juez también rechazó, por lo tanto, el sobreseimiento de Luis Daniel Olivera (encargado de un camping en El Cadillal donde habría ocurrido la fiesta de una de las hipótesis) y de Maximiliano Gallardo, quien estuvo detenido porque una línea telefónica que estaba a su nombre se usó en el teléfono de Paulina. Pero una pericia caligráfica habría demostrado que le habían falsificado la firma en la solicitud del teléfono celular.
De todas maneras, la discrepancia del juez con el pedido de sobreseimiento de López Ávila deberá ser resuelta por el fiscal de Cámara de Apelaciones. Aún se desconoce quién intervendrá en el expediente, ya que el titular de esa fiscalía es Alejandro Noguera, el primer investigador que tuvo el homicidio de Paulina y que fue apartado de la causa por una polémica foto en la casa de Alperovich.
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