31 Agosto 2015
TODOS JUNTOS. Los tres mejores binomios de la competencia taficeña celebran en el podio, acompañados por miembros del organizador, el Alberdi Auto Club.
“Fue mi quinta victoria del año en el certamen Tucumano. Y la novena consecutiva si sumo la que gané del Interprovincial y las tres de finales de 2014 en el Santiagueño. Todo volvió a salir de la mejor manera. Y sí, tengo las mejores opciones para conseguir el título.” Con la felicidad dibujada en el rostro terminó Ricardo Collado (h) el Rally de Tafí Viejo, quinta fecha de la temporada 2015 del Provincial. Fue 1° en la clase A-6 con un VW Gol que navega el santiagueño Gabriel Gubaira. Y por extensión, también ganó la clasificación general de una muy dura prueba que terminaron sólo 15 participantes.
Collado (h) encabezó el “tridente” de la A-6 que ocupó los tres lugares del podio de la general del desafío taficeño, que se hizo por los tramos El Timbó-Paso de las Lanzas y El Cadillal-Ticucho. Gabriel Nieva (navegado por Juan Carreras en un VW Gol) terminó 2° con un “sprint” final tremendo, ya que llegó a esa posición con un “tiempazo” en último especial. Con ello, superó por apenas 3”2/10 al ascendente Bernardo Ortega (h), que corrió con otro Gol, acompañado por Luis Catalfamo.
Sorpresas en la A-7
Para que tres coches de la A-6 terminen arriba de la general, mucho tuvo que ver la debacle de las máquinas de la A-7. De cinco presentadas, sólo terminaron dos, pero con dificultades. Finalmente triunfó Ricardo Collado con un VW Gol navegado por Guillermo Salvatierra; terminó a 1’18”4/100 de su hijo. Y fue segundo Ricardo Fernández, con un VW Senda en el que lo acompañó su hijo Matías.
¿Qué pasó con Andrés y Miguel Reginato, protagonistas del torneo? Abandonaron por distintos problemas: el líder del certamen sufrió un problema en el alternador de su Renault 18. Logró reengancharse en los primes finales y sumó algunos puntos para alejarse un poco de su escolta en el certamen (y ausente en esta carrera), Ariel Villagrán. Lo de Miguel fue peor: quemó la junta de la tapa de cilindros de su R-18. Y el santiagueño Agustín Cerutti (VW Gol) también experimentó problemas mecánicos.
Lord, en la N-1
Ernesto Lord (en la foto, junto a su auto, un Fiat Palio) sigue marcando la pauta en la clase N-1. El juvenil corredor de Yerba Buena, a quien navega Esteban Quinteros, tuvo una muy dura lucha con Gustavo Nazar (VW Senda, acompañado por Daniel Villalba). Ambos quedaron separados por algo más de 1’. “Empecé mal, hasta tuve un fuera de camino y luego hice un trompo. Y desde allí me concentré. Los tiempos empezaron a salir y fui recuperando el tiempo perdido, hasta que pude darle alcance a Gustavo, que hizo una gran carrera”, apuntó el ganador.
Elías, en la A-5
Fue la categoría A-5 una de las que más sufrió la dureza de la competencia: sólo dos máquinas de las seis máquinas que largaron, llegaron dos. La mejor fue la de Pablo Elías. Terminó por sacarle casi 6’ a su escolta, Gonzalo Juárez Brembilla. Este último, apenas llegó al parque cerrado, protagonizó un emocionado festejo con sus familiares y allegados.
Valenzuela, en la A-5s
“Venía de tres fechas de no poder llegar hasta que en la carrera pasada rompí la racha al terminar segundo. Y esta vez llegó el triunfo. Di un gran paso, con un auto excelente que prepara en Salta ‘Tero’ D’Abate.” Muy feliz por su trabajo en el Fiat 128 que navega su papá Luis se mostró Mauricio Valenzuela, ganador de la división menor del rally. Su triunfó fue holgado, por más de 7’ sobre su escolta Pablo Soria. En esta clase, de ocho coches presentados, apenas tres llegaron al final de la competencia.
Collado (h) encabezó el “tridente” de la A-6 que ocupó los tres lugares del podio de la general del desafío taficeño, que se hizo por los tramos El Timbó-Paso de las Lanzas y El Cadillal-Ticucho. Gabriel Nieva (navegado por Juan Carreras en un VW Gol) terminó 2° con un “sprint” final tremendo, ya que llegó a esa posición con un “tiempazo” en último especial. Con ello, superó por apenas 3”2/10 al ascendente Bernardo Ortega (h), que corrió con otro Gol, acompañado por Luis Catalfamo.
Sorpresas en la A-7
Para que tres coches de la A-6 terminen arriba de la general, mucho tuvo que ver la debacle de las máquinas de la A-7. De cinco presentadas, sólo terminaron dos, pero con dificultades. Finalmente triunfó Ricardo Collado con un VW Gol navegado por Guillermo Salvatierra; terminó a 1’18”4/100 de su hijo. Y fue segundo Ricardo Fernández, con un VW Senda en el que lo acompañó su hijo Matías.
¿Qué pasó con Andrés y Miguel Reginato, protagonistas del torneo? Abandonaron por distintos problemas: el líder del certamen sufrió un problema en el alternador de su Renault 18. Logró reengancharse en los primes finales y sumó algunos puntos para alejarse un poco de su escolta en el certamen (y ausente en esta carrera), Ariel Villagrán. Lo de Miguel fue peor: quemó la junta de la tapa de cilindros de su R-18. Y el santiagueño Agustín Cerutti (VW Gol) también experimentó problemas mecánicos.
Lord, en la N-1
Ernesto Lord (en la foto, junto a su auto, un Fiat Palio) sigue marcando la pauta en la clase N-1. El juvenil corredor de Yerba Buena, a quien navega Esteban Quinteros, tuvo una muy dura lucha con Gustavo Nazar (VW Senda, acompañado por Daniel Villalba). Ambos quedaron separados por algo más de 1’. “Empecé mal, hasta tuve un fuera de camino y luego hice un trompo. Y desde allí me concentré. Los tiempos empezaron a salir y fui recuperando el tiempo perdido, hasta que pude darle alcance a Gustavo, que hizo una gran carrera”, apuntó el ganador.
Elías, en la A-5
Fue la categoría A-5 una de las que más sufrió la dureza de la competencia: sólo dos máquinas de las seis máquinas que largaron, llegaron dos. La mejor fue la de Pablo Elías. Terminó por sacarle casi 6’ a su escolta, Gonzalo Juárez Brembilla. Este último, apenas llegó al parque cerrado, protagonizó un emocionado festejo con sus familiares y allegados.
Valenzuela, en la A-5s
“Venía de tres fechas de no poder llegar hasta que en la carrera pasada rompí la racha al terminar segundo. Y esta vez llegó el triunfo. Di un gran paso, con un auto excelente que prepara en Salta ‘Tero’ D’Abate.” Muy feliz por su trabajo en el Fiat 128 que navega su papá Luis se mostró Mauricio Valenzuela, ganador de la división menor del rally. Su triunfó fue holgado, por más de 7’ sobre su escolta Pablo Soria. En esta clase, de ocho coches presentados, apenas tres llegaron al final de la competencia.
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