01 Agosto 2015
No fueron los mecanismos institucionales los que hicieron que R. comenzara a recibir la ayuda que reclama desde hace cinco años para salir del círculo de la violencia. Ayer, cuando su dura historia se hizo conocida por LA GACETA, la buscaron empleados de la Fiscalía de Instrucción, de la Defensoría del Pueblo, de la comuna del pueblo donde se encuentra, del CAPS de esa localidad y de la Policía. Entre varias promesas de ayuda, al menos consiguió que le asignaran una custodia policial para que su ex pareja no cumpla con la amenaza de matarla.
R. tiene 39 años y cinco hijos de entre 12 y 19 años. Tiene cuatro denuncias realizadas contra su ex pareja por violencia de género, y una orden de restricción de acercamiento. Pero igual, él la busca y la golpea. El último ataque ocurrió el viernes de la semana pasada, cuando le pegó con ladrillos en la cabeza, mientras que con un cuchillo le produjo heridas a sus hijos que trataron de ayudarla.
“Me dijo que me va a atacar, que no le importa con quién esté, que me va a matar”, relató la mujer, que luego de la última agresión se escondió en una pieza con sus hijos, y no sale por miedo a que la maten.
“Una señora fue a buscarla para ir a la fiscalía. Ahora le pusieron una consigna policial”, comentó un allegado a la mujer. R. declaró ayer en la Fiscalía de Instrucción de la VII° Nominación, a cargo de Arnoldo Suasnábar, aunque la causa debería ser remitida a la fiscalía de Adriana Reinoso Cuello, que se encontraba de turno cuando ocurrió el hecho.
Los familiares de la mujer dijeron que durante el día la fueron a verla personal de la comuna, del CAPS y de la comisaría para ofrecerle ayuda. También mostró interés en auxiliarla el defensor del Pueblo, Hugo Cabral.
“El abogado Sergio Díaz Juárez llegó hasta la casa y vio cómo estaban los chicos. La señora se encontraba en la fiscalía porque la habían citado para declarar”, explicó Cabral. Díaz Juárez constató la situación en la que estaban los menores, fue a la comisaría, habló con el policía Daniel Gómez y le dejaron un pedido de informes para saber si hay denuncias radicadas y qué medidas se tomaron, dijo el defensor del Pueblo.
“Tienen que contestar por escrito. También les pedimos que haga un patrullaje permanente. Hay un protocolo de protección para niños y adolescentes. En este caso tiene que haber un abordaje integral, asistencia psicológica y en caso de ser necesario, económica. Estamos pidiendo a la dirección de Niñez que active un mecanismo de protección”, aseguró Cabral.
R. tiene 39 años y cinco hijos de entre 12 y 19 años. Tiene cuatro denuncias realizadas contra su ex pareja por violencia de género, y una orden de restricción de acercamiento. Pero igual, él la busca y la golpea. El último ataque ocurrió el viernes de la semana pasada, cuando le pegó con ladrillos en la cabeza, mientras que con un cuchillo le produjo heridas a sus hijos que trataron de ayudarla.
“Me dijo que me va a atacar, que no le importa con quién esté, que me va a matar”, relató la mujer, que luego de la última agresión se escondió en una pieza con sus hijos, y no sale por miedo a que la maten.
“Una señora fue a buscarla para ir a la fiscalía. Ahora le pusieron una consigna policial”, comentó un allegado a la mujer. R. declaró ayer en la Fiscalía de Instrucción de la VII° Nominación, a cargo de Arnoldo Suasnábar, aunque la causa debería ser remitida a la fiscalía de Adriana Reinoso Cuello, que se encontraba de turno cuando ocurrió el hecho.
Los familiares de la mujer dijeron que durante el día la fueron a verla personal de la comuna, del CAPS y de la comisaría para ofrecerle ayuda. También mostró interés en auxiliarla el defensor del Pueblo, Hugo Cabral.
“El abogado Sergio Díaz Juárez llegó hasta la casa y vio cómo estaban los chicos. La señora se encontraba en la fiscalía porque la habían citado para declarar”, explicó Cabral. Díaz Juárez constató la situación en la que estaban los menores, fue a la comisaría, habló con el policía Daniel Gómez y le dejaron un pedido de informes para saber si hay denuncias radicadas y qué medidas se tomaron, dijo el defensor del Pueblo.
“Tienen que contestar por escrito. También les pedimos que haga un patrullaje permanente. Hay un protocolo de protección para niños y adolescentes. En este caso tiene que haber un abordaje integral, asistencia psicológica y en caso de ser necesario, económica. Estamos pidiendo a la dirección de Niñez que active un mecanismo de protección”, aseguró Cabral.
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