29 Julio 2015
PEDIDO DE JUSTICIA. Familiares de Aída y representantes de la Casa de la Mujer concentraron en tribunales. la gaceta / foto de Analía Jaramillo
Esperaban con muchas ansias el inicio del juicio oral, que estaba programado para ayer. Pero los familiares de Aída Correa deberán aguardar hasta mañana para que continúe el proceso donde serán juzgados los dos hombres que están acusados de violar y asesinar a la mujer de 35 años. El brutal crimen fue cometido en 2012, en la localidad de Las Mesadas.
El tribunal, integrado por Emilio Páez de la Torre, Juana Juárez y María Alejandra Balcázar, estaba decidido a comenzar con el debate ayer temprano. Pero un planteo de la defensora oficial Marta Toledo los obligó a pasar a un cuarto intermedio de 48 horas. Se debe a que Toledo asumió recién el lunes la defensa de Aldo Rubén Rodríguez, uno de los imputados, luego de que Carlos Posse renunciara a representarlo. Por lo tanto, solicitó un plazo para empaparse de la causa.
Lectura
Para no perder la mañana, el tribunal resolvió que ayer se diera lectura a la acusación formulada por el fiscal de Instrucción de la X° Nominación, Guillermo Herrera, quien investigó el caso. En el requerimiento de elevación a juicio, Herrera imputó a Rodríguez y a Horacio Ángel Marelli, quien era pareja de la víctima, por el delito de abuso sexual seguido de muerte. Después de escuchar la acusación, los jueces pasaron a un cuarto intermedio hasta mañana a las 8.30.
El debate demandaría al menos cuatro jornadas, según estimaron fuentes judiciales. El principal motivo es la elevada cantidad de testigos, que llega a 35. Cada uno de ellos deberá responder a las indagatorias de Toledo; del abogado Juan Andrés Robles, que defiende a Marelli; de la querellante Mónica López y de la fiscala de Cámara Juana Prieto de Sólimo.
Las preguntas rondarán en torno a lo sucedido la madrugada del 6 de febrero de 2012, cuando Aída fue abusada sexualmente y asesinada. De acuerdo a la acusación de Herrera, la víctima había asistido a un baile la noche anterior junto a su novio (Marelli) y a un grupo de amigos, entre los que también estaba Rodríguez. En un momento, la pareja comenzó a discutir por un mensaje de texto que había llegado al celular de Aída y Marelli le habría propinado una cachetada.
La mujer se retiró sola del local bailable “Paso de Las Lanzas”, para poco después ser interceptada por sus agresores. “En un lugar cercano al sitio donde encontraron el cuerpo de la víctima, y por motivos a determinar, los imputados la atacaron, golpeándola, produciéndole lesiones en distintas partes del cuerpo, abusando sexualmente de ella, provocándole la muerte”, reconstruyó el fiscal Herrera. Según los resultados de la autopsia, la mujer murió por asfixia por estrangulación.
Todo indica que los asesinos intentaron prenderle fuego al cuerpo después de cometer el crimen, pero no consiguieron que ardiera. Una de las principales pruebas que mencionó Herrera en su acusación habla de la coincidencia entre las mordeduras que encontraron en distintas partes del cuerpo de Aída y las piezas dentales de Marelli.
Los dos imputados tendrán la oportunidad de declarar mañana ante el tribunal en cuanto se reanude la audiencia, en la Sala V de la Cámara Penal.
El tribunal, integrado por Emilio Páez de la Torre, Juana Juárez y María Alejandra Balcázar, estaba decidido a comenzar con el debate ayer temprano. Pero un planteo de la defensora oficial Marta Toledo los obligó a pasar a un cuarto intermedio de 48 horas. Se debe a que Toledo asumió recién el lunes la defensa de Aldo Rubén Rodríguez, uno de los imputados, luego de que Carlos Posse renunciara a representarlo. Por lo tanto, solicitó un plazo para empaparse de la causa.
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Para no perder la mañana, el tribunal resolvió que ayer se diera lectura a la acusación formulada por el fiscal de Instrucción de la X° Nominación, Guillermo Herrera, quien investigó el caso. En el requerimiento de elevación a juicio, Herrera imputó a Rodríguez y a Horacio Ángel Marelli, quien era pareja de la víctima, por el delito de abuso sexual seguido de muerte. Después de escuchar la acusación, los jueces pasaron a un cuarto intermedio hasta mañana a las 8.30.
El debate demandaría al menos cuatro jornadas, según estimaron fuentes judiciales. El principal motivo es la elevada cantidad de testigos, que llega a 35. Cada uno de ellos deberá responder a las indagatorias de Toledo; del abogado Juan Andrés Robles, que defiende a Marelli; de la querellante Mónica López y de la fiscala de Cámara Juana Prieto de Sólimo.
Las preguntas rondarán en torno a lo sucedido la madrugada del 6 de febrero de 2012, cuando Aída fue abusada sexualmente y asesinada. De acuerdo a la acusación de Herrera, la víctima había asistido a un baile la noche anterior junto a su novio (Marelli) y a un grupo de amigos, entre los que también estaba Rodríguez. En un momento, la pareja comenzó a discutir por un mensaje de texto que había llegado al celular de Aída y Marelli le habría propinado una cachetada.
La mujer se retiró sola del local bailable “Paso de Las Lanzas”, para poco después ser interceptada por sus agresores. “En un lugar cercano al sitio donde encontraron el cuerpo de la víctima, y por motivos a determinar, los imputados la atacaron, golpeándola, produciéndole lesiones en distintas partes del cuerpo, abusando sexualmente de ella, provocándole la muerte”, reconstruyó el fiscal Herrera. Según los resultados de la autopsia, la mujer murió por asfixia por estrangulación.
Todo indica que los asesinos intentaron prenderle fuego al cuerpo después de cometer el crimen, pero no consiguieron que ardiera. Una de las principales pruebas que mencionó Herrera en su acusación habla de la coincidencia entre las mordeduras que encontraron en distintas partes del cuerpo de Aída y las piezas dentales de Marelli.
Los dos imputados tendrán la oportunidad de declarar mañana ante el tribunal en cuanto se reanude la audiencia, en la Sala V de la Cámara Penal.
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