¿Qué se hizo? Tilda Swinton, irreconocible en su última película

¿Qué se hizo? Tilda Swinton, irreconocible en su última película

El aspecto andrógino de la actriz queda camuflado por el pelo largo y mucho maquillaje y bronceado en “Trainwreck”.

FUERA DEL SET. Swinton, de pelo platinado y piel blanca. FUERA DEL SET. Swinton, de pelo platinado y piel blanca.
22 Julio 2015
Su carácter andrógino ha sido su marca registrada durante todo este tiempo. Por eso hay que verla dos veces (y más) para asimilar que, detrás de su nuevo look, sigue siendo ella. Tilda Swinton se muestra casi irreconocible en su nueva película, “Trainwreck”, en la que interpreta a Dianna, una directora de una revista de moda. Eso sí: no hay quirófanos ni bisturí en el fondo del cambio, sólo el trabajo profesional de un equipo de peluqueros y maquilladores.

“Una peluca, mucho maquillaje y bronceado”. Esas han sido las claves de la transformación, según ha contado la misma actriz de 54 años al Huffington Post. “Me encanta decir que estoy irreconocible. No sé si alguien quisiera ser reconocible en este papel -señaló, en referencia a lo despiadado de la mujer que personifica-. La verdad es que muchas mujeres tienen el look de Dianna y me imagino que no esperaban verlo de mí”, señaló Swinton, famosa por su cabello platinado, su piel blanquísima y sus rasgos que quedan a medio camino entre lo femenino y lo masculino.

Las horas y horas de bronceado, las cejas marcadas y la melena más larga operan el cambio radical en Swinton y la acercan a un modelo más común de mujer. Sin embargo, la belleza natural de la actriz -muchas veces llamada atípica- es muy aclamada en el mundo de la moda. No sólo fue la cara de Chanel (el diseñador Karl Lagerfeld la ha descripto como “un ícono de la elegancia de nuestro tiempo”), sino que también ha prestado imagen a la firma Pringle of Scotland, para la cual protagonizó las campañas femenina y masculina. La última en solicitarla ha sido la empresa de cosméticos Nars.

Propio de Hollywood

“Trainwreck” es una comedia romántica dirigida por Judd Apatow que se estrenó la semana pasada en Estados Unidos y que también está protagonizada por Vanessa Bayer, Randall Park, Colin Quinn, Josh Segarra y Dave Attell.

Tras ganar el Oscar en 2007 por su papel de reparto en “Michael Clayton” y ser reconocida por el público por películas como “La playa” o “Las crónicas de Narnia: el león, la bruja y el armario”, Swinton aparece ahora en esta película protagonizada por una mujer con fobia al compromiso que acabará enamorándose (la interpreta Amy Schumer).

Para beneplácito de sus fans, su metamorfosis ha durado sólo el tiempo de rodaje. En la presentación de la película, Swinton ya lucía su característico look, que la ha convertido en un ícono dentro y fuera de los sets.

Los cambios físicos drásticos por exigencias del guión son habituales en Hollywood. Otras actrices como Charlize Theron en “Monster” o Michelle Pfeiffer en “Stardust” también han tenido que caracterizarse para sus películas. La última transformación resonante fue la de Uma Thurman en la premier de “The slap”, algo que ella atribuyó al maquillaje excesivo.

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