Reato reflexiona sobre “el golpe blando” de 2001

“Tanto De la Rúa como Adolfo Rodríguez Saá dicen que cayeron por una conspiración golpista. Y la misma presidenta de la república, Cristina de Kirchner, dijo varias veces que en 2001 hubo un golpe no tradicional”, afirma desde Buenos Aires Ceferino Reato, anticipando una de las tesis de “12 noches”, el libro en el que ha volcado su investigación sobre aquellas noches del 2001 que marcaron el fracaso de la Alianza y el origen del kirchnerismo. Reato presentará su nuevo libro el miércoles, a las 20.30, en la sede centro del Jockey Club.

“Quería investigar cómo fue que los derechos humanos resurgieron después del 2001; la demanda de juicio y castigo para los que violaron los derechos humanos. Y lo encuentro en el 2001. Como fue una gran crisis, la más importante de la historia, reabrió viejas heridas, entre ellas la de la represión ilegal y ese es el nexo con mis libros anteriores de los 70. Es una investigación periodística, anticipa.

-¿Hubo un golpe de Estado no tradicional?

- Tanto De la Rúa como Adolfo Rodríguez Saá dicen que cayeron por una conspiración golpista. Y Cristina de Kirchner dijo varias veces que en 2001 hubo un golpe no tradicional. Yo señalo muchos indicios a favor de esa tesis, pero hay otros que están en contra. Pero yo no puedo saldar; no creo en el periodismo que explica la historia de una manera simple. Trato de mostrarle al lector todos los indicios a favor y en contra para que sea él el que tome la decisión. Son hechos recientes. Y ligo esa inquietud con otra: por qué los gobiernos no peronistas no pueden terminar sus gobiernos en la Argentina. Trato de ver cuáles son las anomalías del sistema político que explican por qué no pueden hacerlo. Diría que si no hubo golpe, el peronismo aprovechó la situación de vacío de poder para tomar el poder. Es un movimiento siempre al acecho. La crisis comienza con la caída de un radical como De la Rúa y termina con la asunción de un peronista, como Duhalde. Si no hubo golpe, al menos aprovechó los problemas y empujó a De la Rúa.

- ¿Esas 12 noches del 2001 moldearon los años siguientes?

- Sí, claro. Yo creo que la nueva Argentina nació en la crisis del 2001. El kirchnerismo, su predominio político, se explica por un nuevo consenso social que surge en el 2001. Aparece una demanda fuerte por un estado que te proteja más allá de que sea eficaz o no. Es más importante el consumo que la inversión. El kirchnerismo lo aprovechó muy bien y sin duda, quien venga, aún si llega a ganar Macri, va a tener que utilizar esta agenda.

-¿Perdió sentido el término golpe blando?

- Creo que sí. Lo usan para inhibir cualquier crítica. En la época que cae De la Rúa hubo mucho presidentes en la región que cayeron. Ahí empezó a hablarse de golpe blando, golpe no tradicional o golpe de la calle. Creo que es una definición que pierde valor porque el Gobierno lo usa para desechar cualquier crítica. Ahora, entre esos indicios que están a favor de la hipótesis del golpe blando está que los saqueos, no sólo en el gran Buenos Aires, sino también en Mendoza y en otros lugares, según los datos que yo saqué, fueron todos organizados por punteros políticos del peronismo. En Mendoza y en Buenos Aires, que fueron tan importantes para demostrar que el gobierno de De la Rúa había perdido el control de la calle, esos saqueos fueron organizados por los punteros políticos peronistas. Lo difícil de determinar es si respondían al diseño de Duhalde, quien lo niega. Pero lo que está fuera de toda duda es que fueron organizados. Sucede también que la Justicia investigó las denuncias de De la Rúa y Rodríguez Saá; cayeron en el juzgado de Oyarbide y al principio se movieron un poco y después se desinflaron conforme se consolidaba el gobierno de Duhalde.