Cuatro variedades de caña que pueden adaptarse a distintos escenarios ambientales

Cuatro variedades de caña que pueden adaptarse a distintos escenarios ambientales

Roberto Sopena describió las características morfológicas, fenológicas y tecnológicas de cada una

04 Julio 2015
Las cuatro variedades inscriptas por el INTA en el Instituto Nacional de Semillas (Inase) y presentadas en una jornada realizada días atrás en la sede de la EEA Famaillá son: L 91-281, INTA NA 89-686, INTA NA 91-209 e INTA CP 98-828.

Roberto Sopena, jefe del Grupo Caña de Azúcar, presentó las características morfológicas, fenológicas y tecnológicas, además de la modalidad madurativa y el comportamiento ante las principales enfermedades, limitantes ambientales y escenarios potenciales de manejo.

Variedad L 91-281: Porte semi-erecto y abundante follaje verde claro. Tallos delgados, de color morado intenso, recubiertos por vaina adherida morada. Altura de despuntado uniforme. Brotación y establecimiento rápido con buena cobertura en el entresurco. Buena capacidad de rebrote en ‘caña soca’ y muy buena longevidad de cepa. La población de tallos puede fluctuar entre 18 y 19 por metro lineal y el peso promedio varía entre 700 y 750 gramos.

Se destaca en suelos sueltos, de textura arenosa y bajo contenido de materia orgánica. Maduración intermedia, con niveles sacarinos inferiores a TucCP 77-42 en inicios de zafra, pero superándola a partir de la segunda quincena de agosto, con deterioro moderado después de las heladas. En ambientes en los que se destaca, presenta tonelajes superiores a LCP 85-384 y similares a TucCP 77-42.

Variedad INTA NA 89-686: Porte semi-erecto, follaje verde intenso con tallos de peso mediano, color verde pálido, con regular serosidad, recubiertos por vainas de aurículas bien visibles. Buena cobertura a cosecha. Ritmo de crecimiento moderado al principio, con fuerte repunte hacia febrero, marzo y abril. La población de tallos puede variar entre 15 y 16/metro lineal y el peso promedio varía entre 750 y 800 gr. Se adapta a suelos húmedos, inclusive pesados, con retención temporaria de agua en algún momento del ciclo. Maduración intermedia, con nivel sacarino creciente desde la segunda quincena de julio hasta lograr el máximo en agosto-septiembre, en Tucumán, y con mejor precocidad en Salta y Jujuy. Tonelaje inferior al promedio de LCP 85-384 y TucCP 77-42, con menor número de tallos (entre 10 y 15%), y mayor peso individual de tallos molibles (un 5%).

INTA NA 91-209: Porte semi-erecto y de gran altura, con tallo de diámetro delgado-medio de color verde, vaina poco adherida al tallo con despunte corto y uniforme. Rápida emergencia y gran vigor inicial de crecimiento, lo que genera buena competencia con malezas. La población de tallos puede fluctuar entre 15 y 16/metro lineal y el peso promedio varía entre 850 y 900 gr. Se adapta a buenos suelos y bien drenados, pero se recomienda en suelos con poca materia orgánica por su tendencia al vuelco. Maduración intermedia con buena acumulación de azúcar hacia la primera quincena de julio. Alto tonelaje, especialmente en ‘soca 1 y 2’, superando a los otros cultivares. Estabiliza su producción en valores medios hacia ‘socas’ de más edad, con buena estabilidad y duración prolongada de la cepa.

INTA CP 98-828: Porte erecto, de mediana altura, tallo delgado de color amarillento con despunte verde claro y vaina bien adherida al tallo. Tiempo intermedio en cuanto a emergencia de los brotes. Necesita suelos con buena temperatura para un mejor establecimiento. Rápido crecimiento desde fines de diciembre a mediados de marzo.

La población de tallos puede variar entre 15 y 16/m y el peso promedio varía entre 800 y 850 gr. Maduración temprana, buena acumulación de azúcar desde mayo a fines de septiembre. Tonelaje medio-alto en ‘soca 1 y 2’, especialmente, estabilizando su producción en valores medios hacia ‘socas’ de más edad.

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