30 Junio 2015
BUENOS AIRES.- La mayor parte de los contadores consultados en una encuesta (un 42,6%) que se dio a conocer ayer, consideró que los procedimientos establecidos por la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) para incorporar desde el miércoles próximo a todos los Responsables Inscriptos al nuevo régimen de Factura Electrónica no son simples y dificultan su implementación.
El sondeo de opinión fue realizado a fines de mayo por Thomson Reuters y participaron cerca de 70 contadores públicos, titulares o socios de Estudios Contables pequeños o medianos de todo el país. Según el trabajo, el 94% de los profesionales consultados hizo saber que tiene, al menos, un cliente que debe incorporarse al nuevo régimen.
La obligación que impuso el organismo que encabeza Ricardo Echegaray impactará sobre más de 400.000 empresas que antes no estaban incluidas, modalidad que, según Thomson Reuters, acompaña una tendencia global de automatización de procesos en materia de gestión fiscal y tributaria.
A su vez, tres de cada cuatro (el 76%) señaló en el relevamiento que está capacitado para asesorar a sus clientes en la implementación de la Factura Electrónica. Sobre la fecha de vigencia y en línea con quienes critican la dificultad de los procedimientos, cuatro de cada 10 encuestados hicieron saber que el plazo para poner en marcha el sistema era “escaso”. Respecto a este último aspecto, considerado más que importante para llegar a una implementación adecuada, el informe que acompañó al relevamiento recordó que durante abril y mayo, los contadores públicos se encuentraron especialmente ocupados por los vencimientos del impuesto a las Ganancias y Bienes Personales.
Thomson Reuters también advirtió que el cumplimento del régimen sólo se puede hacer a través de medios informáticos, lo cual deja obsoletos a los sistemas de software que no son capaces de brindar esta prestación. “Ante esto, una gran cantidad de empresas y profesionales deberán actualizarse en la materia”, añadió.
Otro punto que reveló el trabajo es que los contadores tienen opiniones divididas con respecto a si la Factura Electrónica va a mejorar el funcionamiento de la compañías que lo incorporan. Prácticamente, la misma cantidad opinó que va a ser algo positivo, negativo o que no va a afectar la eficiencia de la empresas. Desde el punto de vista de los profesionales, el 57% de los encuestados consideró que la nueva modalidad será positiva para su actividad y va a facilitar el asesoramiento para el cumplimiento impositivo y contable.
Por último, el director de los negocios de Tax & Accounting Software de Thomson Reuters en la Argentina, Daniel Skiarski, comentó que la implementación del nuevo régimen implica un verdadero cambio de paradigma.
Según el ejecutivo, su empleo significa dotar al organismo fiscal de información en tiempo real, en forma concomitante con las operaciones que conciertan los contribuyentes, de manera de aplicar controles previos para la emisión de los comprobantes. (DyN)
El sondeo de opinión fue realizado a fines de mayo por Thomson Reuters y participaron cerca de 70 contadores públicos, titulares o socios de Estudios Contables pequeños o medianos de todo el país. Según el trabajo, el 94% de los profesionales consultados hizo saber que tiene, al menos, un cliente que debe incorporarse al nuevo régimen.
La obligación que impuso el organismo que encabeza Ricardo Echegaray impactará sobre más de 400.000 empresas que antes no estaban incluidas, modalidad que, según Thomson Reuters, acompaña una tendencia global de automatización de procesos en materia de gestión fiscal y tributaria.
A su vez, tres de cada cuatro (el 76%) señaló en el relevamiento que está capacitado para asesorar a sus clientes en la implementación de la Factura Electrónica. Sobre la fecha de vigencia y en línea con quienes critican la dificultad de los procedimientos, cuatro de cada 10 encuestados hicieron saber que el plazo para poner en marcha el sistema era “escaso”. Respecto a este último aspecto, considerado más que importante para llegar a una implementación adecuada, el informe que acompañó al relevamiento recordó que durante abril y mayo, los contadores públicos se encuentraron especialmente ocupados por los vencimientos del impuesto a las Ganancias y Bienes Personales.
Thomson Reuters también advirtió que el cumplimento del régimen sólo se puede hacer a través de medios informáticos, lo cual deja obsoletos a los sistemas de software que no son capaces de brindar esta prestación. “Ante esto, una gran cantidad de empresas y profesionales deberán actualizarse en la materia”, añadió.
Otro punto que reveló el trabajo es que los contadores tienen opiniones divididas con respecto a si la Factura Electrónica va a mejorar el funcionamiento de la compañías que lo incorporan. Prácticamente, la misma cantidad opinó que va a ser algo positivo, negativo o que no va a afectar la eficiencia de la empresas. Desde el punto de vista de los profesionales, el 57% de los encuestados consideró que la nueva modalidad será positiva para su actividad y va a facilitar el asesoramiento para el cumplimiento impositivo y contable.
Por último, el director de los negocios de Tax & Accounting Software de Thomson Reuters en la Argentina, Daniel Skiarski, comentó que la implementación del nuevo régimen implica un verdadero cambio de paradigma.
Según el ejecutivo, su empleo significa dotar al organismo fiscal de información en tiempo real, en forma concomitante con las operaciones que conciertan los contribuyentes, de manera de aplicar controles previos para la emisión de los comprobantes. (DyN)
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