02 Junio 2015
REUTERS
JIANLI, China.- Los equipos de rescate consiguieron sacar hoy a tres supervivientes del casco de un barco que se hundió en el río Yangtsé en el centro de China, en un naufragio que podría dejar más de 400 muertos.
Una burbuja de aire en el casco permitió un pequeño milagro, pero a medida que pasan las horas es menos probable conseguir rescatar con vida a los más de 400 desaparecidos del total de más de 450 pasajeros que iban a bordo del crucero "Estrella de Oriente", que se hundió anoche cerca de Jianli, en la provincia de Hubei, a causa de un tornado.
Aunque los equipos de rescate trabajan sin descanso hasta ahora sólo han podido ser salvadas 15 personas, informó la televisión estatal, y se recuperaron seis cadáveres. Xinhua informó que los rescatistas creen que puede haber más supervivientes, pero el fuerte viento y la lluvia dificultan el trabajo.
Los buzos señalaron que se tardó mucho tiempo en sacar a un joven de 20 años debido a la complicada estructura interior del barco, que se encuentra hundido boca abajo en el agua, que llega a los 15 metros de profundidad. Gracias a que hubo respuesta a los golpes de los equipos de rescate sobre el casco los efectivos supieron que alguien había sobrevivido. Los expertos creen que puede haber varias burbujas dentro del barco en las que se encuentren más pasajeros.
Para llegar hasta las tres personas que pudieron ser sacadas, los expertos hicieron un agujero en el metal. El primer ministro del país, Li Keqiang, coordinó los trabajos personalmente desde el lugar del accidente. A bordo del barco iban en su mayoría ancianos que habían comprado un crucero turístico de 11 días por el Yangtsé con excursiones para visitar lugares históricos. Muchos fueron sorprendidos por la tragedia mientras dormían.
Entre los rescatados con vida están el capitán y el jefe de máquinas, que fueron detenidos. Ambos declararon que anoche se produjo un tornado que hizo volcar el buque. "En apenas uno o dos minutos se hundió", cita al capitán la agencia local Xinhua. La oficina meteorológica confirmó en base a mediciones de radares que en el momento del accidente hubo vientos huracanados en la zona durante unos 15 a 20 minutos.
El barco "Estrella del Oriente" (Dongfang Zhixing) se encontraba en viaje de Nanjing, en el este de China, hacia Chongking, en el sudoeste del país, con turistas chinos en su mayoría de entre 60 y 80 años. El naufragio se registró cerca del popular destino turístico de las Tres Gargantas en Jianli, donde los vientos llegaban "hasta los 120 kilómetros por hora", según el diario "Hubei Ribao".
Zhang Hui, empleado de una agencia de viajes de 43 años, dijo que el viento y la fuerte lluvia golpearon de tal forma el lado derecho del barco que el agua empezó a entrar incluso por las ventanas cerradas. Luego la nave se escoró. "Parece que estamos en problemas", le dijo entonces a sus compañeros, según relató a la agencia estatal Xinhua.
Tuvieron solamente 30 segundos para conseguir un chaleco salvavidas y ya el buque se había volteado. Zhang explicó que no sabe nadar pero tampoco había podido ponerse el chaleco, así que se agarró a él flotando a la deriva en el agua fría. Al principio oía los gritos de una decena de personas, pero después se fueron apagando, añadió.
Un barco que pasó a su lado ni lo vio ni lo oyó. Al amanecer llegó flotando hasta la costa, se arrastró con dificultad hasta una casa y ahí fue llevado al hospital. "Sigo vivo", relató con un hilo de voz a su familia en cuanto pudo llamarlos. Su mujer y su hijo de 15 años se echaron a llorar porque no pensaban que hubiese sobrevivido. "Si no hubiese sido todo tan rápido podrían haberse salvado muchos", cree Zhang Hui, porque había muchos chalecos salvavidas.
Del barco de 76 metros de largo sólo sobresalen del agua la quilla, parte de la hélice y del timón. Hay informaciones contradictorias sobre la cantidad de personas que iban a bordo. Al principio se habló de 458 pero después de 456. De ellas 405 eran turistas, la mayoría de entre 60 y 80 años, consignó la agencia Reuters.
Una burbuja de aire en el casco permitió un pequeño milagro, pero a medida que pasan las horas es menos probable conseguir rescatar con vida a los más de 400 desaparecidos del total de más de 450 pasajeros que iban a bordo del crucero "Estrella de Oriente", que se hundió anoche cerca de Jianli, en la provincia de Hubei, a causa de un tornado.
Aunque los equipos de rescate trabajan sin descanso hasta ahora sólo han podido ser salvadas 15 personas, informó la televisión estatal, y se recuperaron seis cadáveres. Xinhua informó que los rescatistas creen que puede haber más supervivientes, pero el fuerte viento y la lluvia dificultan el trabajo.
Los buzos señalaron que se tardó mucho tiempo en sacar a un joven de 20 años debido a la complicada estructura interior del barco, que se encuentra hundido boca abajo en el agua, que llega a los 15 metros de profundidad. Gracias a que hubo respuesta a los golpes de los equipos de rescate sobre el casco los efectivos supieron que alguien había sobrevivido. Los expertos creen que puede haber varias burbujas dentro del barco en las que se encuentren más pasajeros.
Para llegar hasta las tres personas que pudieron ser sacadas, los expertos hicieron un agujero en el metal. El primer ministro del país, Li Keqiang, coordinó los trabajos personalmente desde el lugar del accidente. A bordo del barco iban en su mayoría ancianos que habían comprado un crucero turístico de 11 días por el Yangtsé con excursiones para visitar lugares históricos. Muchos fueron sorprendidos por la tragedia mientras dormían.
Entre los rescatados con vida están el capitán y el jefe de máquinas, que fueron detenidos. Ambos declararon que anoche se produjo un tornado que hizo volcar el buque. "En apenas uno o dos minutos se hundió", cita al capitán la agencia local Xinhua. La oficina meteorológica confirmó en base a mediciones de radares que en el momento del accidente hubo vientos huracanados en la zona durante unos 15 a 20 minutos.
Rescatistas salvan sobrevivientes del barco accidentado en la sección de #Jianli, China (Xinhua/Xiao Yijiu) ah pic.twitter.com/T5Z5m6gaTa
— XinhuaGráficaEspañol (@Xinhua9) junio 2, 2015El barco "Estrella del Oriente" (Dongfang Zhixing) se encontraba en viaje de Nanjing, en el este de China, hacia Chongking, en el sudoeste del país, con turistas chinos en su mayoría de entre 60 y 80 años. El naufragio se registró cerca del popular destino turístico de las Tres Gargantas en Jianli, donde los vientos llegaban "hasta los 120 kilómetros por hora", según el diario "Hubei Ribao".
Zhang Hui, empleado de una agencia de viajes de 43 años, dijo que el viento y la fuerte lluvia golpearon de tal forma el lado derecho del barco que el agua empezó a entrar incluso por las ventanas cerradas. Luego la nave se escoró. "Parece que estamos en problemas", le dijo entonces a sus compañeros, según relató a la agencia estatal Xinhua.
Tuvieron solamente 30 segundos para conseguir un chaleco salvavidas y ya el buque se había volteado. Zhang explicó que no sabe nadar pero tampoco había podido ponerse el chaleco, así que se agarró a él flotando a la deriva en el agua fría. Al principio oía los gritos de una decena de personas, pero después se fueron apagando, añadió.
Un barco que pasó a su lado ni lo vio ni lo oyó. Al amanecer llegó flotando hasta la costa, se arrastró con dificultad hasta una casa y ahí fue llevado al hospital. "Sigo vivo", relató con un hilo de voz a su familia en cuanto pudo llamarlos. Su mujer y su hijo de 15 años se echaron a llorar porque no pensaban que hubiese sobrevivido. "Si no hubiese sido todo tan rápido podrían haberse salvado muchos", cree Zhang Hui, porque había muchos chalecos salvavidas.
Del barco de 76 metros de largo sólo sobresalen del agua la quilla, parte de la hélice y del timón. Hay informaciones contradictorias sobre la cantidad de personas que iban a bordo. Al principio se habló de 458 pero después de 456. De ellas 405 eran turistas, la mayoría de entre 60 y 80 años, consignó la agencia Reuters.
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