Una persecución tras un robo terminó con un ladrón herido

Juan Ángel Díaz estaba a pocos metros de uno de los asaltantes que, un rato antes, lo había amenazado con un revólver para robarle una caja registradora. El asalto había ocurrido alrededor de las 11.30 en la panadería “Castillo”, ubicada en avenida Francisco de Aguirre al 1.900, donde la víctima trabaja como cajero. Una hora más tarde, sobre el pasto de una propiedad ubicada en Francisco de Aguirre al 800, estaba tirado el sospechoso boca abajo, al lado de la caja robada.

Díaz llegó hasta el lugar y se mostraba compungido. Se esforzaba para que la angustia del llanto no le cortara la voz. “¿Cómo no voy a tener miedo si no sabés lo que te pueden hacer? Uno está desvalido”, analizó.

“Entraron mostrando armas. No podés hacer nada. Te apuntan o te ponen la pistola en el estómago. No me golpearon porque estoy detrás del mostrador. Gracias a Dios no entraron para el otro lado. En ese momento no había clientes. Empujaron la puerta y nos atacaron rápido, no disimularon nada”, agregó Díaz, que tiene 62 años y que trabaja en la panadería “Castillo” hace 25 años.

Germán Bellido, otro de los empleados de la empresa, dijo que estaba en la parte de atrás del negocio cuando los dos asaltantes entraron a la panadería. “De ese lugar no se puede ver la entrada. Cuando salí hacia el mostrador me apuntaron y nos quedamos todos quietos. Uno de los asaltantes estaba muy nervioso y se quería ir. Tenían cascos puestos pero uno de ellos se lo sacó. Nos pidieron los celulares. Les dijimos que no los teníamos y se estaban yendo sin nada hasta que uno de ellos se volvió y arrancó la registradora”, explicó.

Al parecer, cuando los sospechosos atacaron a Díaz para que les diera el dinero, trabaron el sistema de apertura de la máquina. Por eso tuvieron que arrancarla para hacerse del botín.

Al salir a la vereda de la panadería, subieron a una moto Yamaha 250 azul y emprendieron su huida. El propietario de la firma llamó al 911 y un móvil de ese sistema de emergencias identificó a los fugitivos cuando circulaban por Emilio Castelar y San Miguel.

En esa esquina comenzó la persecución que terminó en Francisco de Aguirre al 800, cuando los asaltantes perdieron el control de la motocicleta y cayeron sobre la platabanda de la avenida, informó el jefe de la seccional 5ª, Cándido Galván.

El comisario también dijo que, al caer de la moto, los sospechosos corrieron y que uno de ellos disparó contra los policías que los perseguían para intentar cubrir su escape. “El personal respondió el ataque hiriendo a uno de los asaltantes en la axila. Este sujeto fue traslado al Centro de Salud y está fuera de peligro. Su cómplice fue reducido y se les secuestraron dos revólveres, uno de calibre 32 y otro del 38”, puntualizó Galván.

Los detenidos tienen 25 y 39 años y, según Galván, serían los autores de un robo que se cometió el 24 de abril pasado en Las Talitas. “La víctima de ese robo pasó por el lugar donde detuvimos a estos sujetos y reconoció la moto en la que circulaban. Después se acercó a la seccional y constatamos que se trataba de la Yamaha que le habían robado a él. Cuando entraron a su casa lo golpearon brutalmente y, además de la moto, le robaron $ 5.000, una filmadora y tres celulares, haciéndose pasar por policías”, afirmó.