Un amor inolvidable en una finca de Tafí Viejo

De pronto llega el amor y pone contra las cuerdas a Carmen. Ella es una ama de casa de Tafí Viejo que se debate entre mantener a su familia y responder a las imposiciones de ser madre y esposa, y seguir a Carlos en su deambular sin rumbo sin rumbo, como fotógrafo free lance.

“Sublime lemoncello” parte de esa historia simple y sencilla para ahondar en los misterios de una pareja que se encuentra y a la que los condicionamientos sociales golpean de lleno. La obra escrita, dirigida y protagonizada por Rolo Andrada se estrenará esta noche, con Vicky Martínez compartiendo el escenario en una puesta en escena minimalista y con pocos elementos.

Si bien el debut será hoy en la sala principal del Círculo de la Prensa, las funciones del grupo Armando Discépolo serán sólo sábado y domingo desde este fin de semana y por dos meses.

“Es un proyecto que vengo pensando hace 10 años. Quería escribir y escribía poesías y relatos sobre cosas sueltas del mundo interior y del exterior, y de lo que descubrís cuando te encontrás con otra persona, que pueden ser experiencias tanto complementarias como conflictivas, que dan lugar a amores, desamores, amistades y enemistades. Pero todo se aclaró cuando volví a ver ‘Los puentes de Madison’, que me sirvió de inspiración para este texto, que no es una copia ni una adaptación de la película”, aclara Andrada.

El actor resaltó que la obra indaga sobre los diferentes mundos que vive cada individuo, “pero con profundidad, sutileza y mucha simpleza, a partir de un encuentro súbito, fugaz y efímero entre un hombre y una mujer, ambos maduros”. “Todo transcurre entre las fincas de limón de Tafí Viejo, durante tres días en que dura la relación inolvidable entre ambos, que los marca por el resto de la vida”, agrega.

La puesta fecha la relación en 1992, cuando Carmen tiene hijos adolescentes y vive diariamente una rutina que la agobia, momento en que llega Carlos a fotografiar los resabios de la arquitectura española en las casas de la zona. Y termina 20 años después, con ella ya viuda y con Carlos muerto, frente a una caja de recuerdos.

“No trata sobre un amor trunco, sino sobre un amor no concretado, que no es lo mismo. Ambos esperan el momento adecuado y preciso para reencontrarse. En el fondo, habla de que nadie está exento de enamorarse de otra persona”, puntualiza.

Carmen es el primer protagónico de Martínez, quien ya integró los elencos de “Las troyanas”, “El conventillo de la Paloma”, “Tío Vania” y “Argentinos”, entre otras obras. “Es una oportunidad enorme para mostrar mi aprendizaje y mi crecimiento, porque el teatro es el lugar donde me siento más feliz en la vida”, afirma.

La actriz destaca que “la obra aborda, desde una temática accesible, mucho del interior de dos personajes que son muy distintos”. “En el texto se nota mucho la represión de la sociedad, con la imposición de las reglas de un matrimonio tradicional, de ser madre de hijos y señora de la casa, postergando su profesión de maestra por las obligaciones que debe atender. Ante ese cuadro, se resigna a cumplir con esos deberes, pese a que no sea lo que realmente quiere, hasta que una noche se permite vivir una fantasía. El mensaje toca la vida de mucha gente que se priva de vivir ciertas cosas”, añade.

“El amor es lo que te moviliza a sentir dos emociones extremas: ser muy feliz o sufrir un vacío y un dolor muy grande. Todo depende de cómo te fue en la experiencia que tuviste, pero no hay escapatoria a una de estas alternativas”, concluye Martínez.

DEBUTAN HOY
• A las 22, en El Círculo de la Prensa, Mendoza 240.