22 Diciembre 2014
ARCHIVO LA GACETA
BUENOS AIRES.- Luego de que el presidente del Banco Central, Alejandro Vanoli, deslizara que en 2015 se flexibilizarían las actuales restricciones en el mercado cambiario, el secretario general de la Presidencia, Aníbal Fernández, salió a relativizar esa afirmación al sostener que “no se puede levantar el cepo porque no hay cepo” al dólar.
“La Argentina no emite dólares (por eso) no tiene más remedio que hacerse de los dólares que nacen de la balanza comercial para poder cumplir con los pagos de los productos que se compran, que son componentes de productos fabricados en la Argentina, de la misma manera con el turismo y la deuda”, apuntó Fernández en declaraciones a radio La Red.
“Con lo cual, (el Estado) puede tener alguna limitación y circunstancialmente poner cuidado en el movimiento de la divisa, pero no mucho más que eso”, agregó, en su argumentación de por qué no hay un cepo cambiario, pese a la vigencia de restricciones de distinto tipo en el mercado de divisas.
“Tan cierto es, que la devaluación durante 2013 rondó el 33% y va a terminar el 2014 con algo parecido”, agregó.
Ante la pregunta de si ahora que asumió como secretario general de la Presidencia pensaba abandonar su precandidatura presidencial, respondió: “no pienso bajarme de nada”, luego de lo cual se manifestó confiado a ganarle al gobernador Daniel Scioli en las elecciones internas del Frente para la Victoria.
Cargó con dureza contra el líder del Frente Renovador, Sergio Massa, por su promesa de levantar el cepo: “Massa es como el mate cocido: llena pero no engorda, no hay que preocuparse mucho. Dice cualquier cosa. Es un océano de un centímetro de profundidad. El ha encontrado un leit motiv de su campaña en meterle miedo a la gente. Dijo tantas estupideces que no tiene sentido dar explicaciones”.
Y consultado sobre si tuvo un acercamiento con el jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri, expresó: “tengo con Macri cientos de miles de millones de diferencias. ¿Qué diferencia veo entre Massa y Macri? Que Macri siempre es coherente, no coincidí nunca con él, pero es coherente; Massa no: le dieron una calesita y la chocó”.
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