Viven con miedo en un barrio de Yerba Buena

Viven con miedo en un barrio de Yerba Buena

Los vecinos denunciaron una ola delictiva.

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22 Diciembre 2014
Los delincuentes no sólo acechan las paradas de los colectivos, sino que se atreven a ingresar a las casas y llevarse lo primero que encuentran. Esa situación mantiene en alerta a los vecinos del barrio Batalla de Tucumán, en Yerba Buena, quienes ya no saben qué hacer para evitar ser asaltados.

Lo que colmó la paciencia de los vecinos fue la situación vivida por Ayelén Paz, una joven de 21 años que fue asaltada dos veces en casi tres meses. El último hecho ocurrió el lunes a la noche, cuando bajó del colectivo en la avenida Presidente Perón al 2.500. Un joven encapuchado que viajaba en el mismo ómnibus descendió por detrás de ella, se encontró con un motociclista y entre los dos la golpearon y la tiraron al piso para quitarle el celular y la cartera.

“En esa esquina hay una cámara de seguridad que debía haber registrado todo. Si hubiera funcionado, hubieran alertado a los policías del patrullero que estaba a dos cuadras, pero no se les movió un pelo”, se quejó Hugo Paz, padre de la víctima. Y contó que, en el robo anterior, a su hija la siguieron dos hombres por esa misma avenida para luego golpearla y quitarle sus cosas. “Estos hechos de violencia son traumáticos para una chica joven. Estamos ante una situación en la que ya no sabemos qué es lo próximo que puede pasar”, remarcó.

Identificados

Julio (pidió que se proteja su apellido) contó que vive en una manzana cerrada dentro del Batalla de Tucumán. “En una semana nos entraron a robar tres veces”, aseguró. Carolina Serrentino, por su parte, indicó que los robos en las viviendas son cada vez más frecuentes y que todos los vecinos saben quiénes son los delincuentes y dónde viven. “Son cinco adolescentes de barrios cercanos y la Policía lo sabe. A uno de ellos lo denuncié cuatro veces, con nombre y apellido, porque me robó adentro y afuera de mi casa. Las denuncias están en la Fiscalía V°. Nunca recuperé las cosas y nunca tuve una respuesta tampoco”, se quejó Serrentino.

Marcelo Gay, que también vive en el barrio, recordó que hace cuatro o cinco años mantuvieron una reunión con las autoridades de la comisaría y de la intendencia de Yerba Buena para debatir la situación de inseguridad. “Todos se lavan las manos. Nunca hubo una solución. Desgraciadamente, según la distribución geográfica, de la avenida (Presidente Perón) para acá ya pertenecemos a la comisaría de Cebil Redondo, pero ahí nos dicen que pertenecemos a Yerba Buena y entre ellos se pasan la pelota”, reclamó el hombre.

“Hay muchísimas falencias, pero lo que pedimos es prevención porque el 911 viene cuando ya pasaron las cosas. Estamos desprotegidos, tenemos chicos y no estamos tranquilos”, insistió Gay.

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