“Me costó lograr el título”

“Me costó lograr el título”

Once años después de su debut, Matías Rossi admitió lo duro que fue para él coronarse

PERSONAJE. Matías Rossi es uno de los pilotos más agradables del ambiente automovilístico argentino. Como deportista, su historial suma cada vez más títulos. Foto Guillermo Cejas / Especial Corsa PERSONAJE. Matías Rossi es uno de los pilotos más agradables del ambiente automovilístico argentino. Como deportista, su historial suma cada vez más títulos. Foto Guillermo Cejas / Especial Corsa
12 Diciembre 2014
En el mismo escenario en el que hizo su debut en el Turismo Carretera aquel 11 de mayo de 2003, Matías Leonardo Rossi celebró su primera corona en la especialidad poco m ás de once años después. Y en ese tiempo mucha agua pasó debajo del puente.

Varias veces estuvo cerca de conseguir este logro, pero factores deportivos, en algunos casos; y extradeportivos, en otros; provocaron que no pudiese ser. Sin embargo, el piloto de Del Viso de 30 años no se rindió. Por el contrario, redobló su apuesta y año tras año fue siempre candidato al título. Por eso la de 2014 quedará marcada como la temporada en la que, finalmente, el “Misil” inscribió su nombre entre los campeones de la popular categoría.

- ¿Qué significado tiene el título en un equipo que casi lo hicieron a tu medida?

- Al Donto Racing llegamos en 2012 medio de casualidad y luego del retiro del JP Racing. Laureano Campanera, el dueño de la estructura, me abrió las puertas, me permitió llevar parte de mi grupo de trabajo y allí comenzamos este camino. Tengo un equipo tremendo, siempre lo recalco. Hay mucha capacidad y buena gente. Este año fue excelente. El equipo no cometió errores y yo fallé sólo en la carrera de Junín. Creo que todavía no caigo. Estoy en “modo carrera”, en “modo frío”, pero a medida que vayan pasando los días me va a caer la ficha. Esto me ha costado mucho.

- ¿Tardó más de lo esperado este festejo?

- Se hizo esperar, pero todo lo que cuesta vale la pena. Muchas veces me fui muy amargado de acá, de Buenos Aires, hasta que un día me fui campeón del TC. Nunca tardé 10 años en ganar un campeonato en el resto de las divisiones en las que competí. Es el título que más me costó conseguir, y tiene un significado diferente porque se trata de la categoría más popular del país. Pero sé muy bien que todos los campeonatos cuestan, no hay uno más fácil que otro.

- Entonces, ¿tiene sabor a revancha este título que lograste?

- No, revancha no. Lo dije muchas veces, cosas injustas nos relegaron en varias oportunidades de pelear por el campeonato y hay otras en que hemos errado nosotros. Pero capitalizamos los errores para bien. Y eso se vio reflejado este año en el que no hemos fallado nunca en la Copa de Oro. Cuando uno no para y tiene esta regularidad, las chances de lograr el campeonato se incrementan. Y este año fuimos muy contundentes.

- ¿Cómo fue la noche previa? ¿Pudiste dormir bien?

- Fue normal, dormí muy bien; no me quedé en el circuito, me fui a mi casa de Del Viso. Trato de ser lo más frío posible en estos momentos. Intento que la emoción no me invada en estas situaciones. No es sencillo, pero hay que estar con la cabeza lo más despejada posible. Sí sabía que el domingo sería un gran día. No todos los años se puede llegar a la última fecha del torneo con posibilidades de ser campeón. Y en este caso, arribamos con una buena diferencia.

- Con este título, ¿considerás que podés convertirte en ídolo de la marca?

- No me siento ídolo de Chevrolet, ni corro para serlo. Como dije en su momento, soy hincha del deporte. El ser ídolo va más en la gente. Sí de mi parte siempre me voy a entregar para darlo todo e ir al frente. Esa es mi esencia. Además, sabía que en algún momento iba a llegar. Siempre estando en la pelea, como me tocó estar en el último tiempo, se podía dar. Es increíble lo que costó. He pegado muchas veces en el palo y después de varias temporadas se dio. Sé lo que significa un campeonato del TC para el “afuera”, ahora quiero vivirlo desde “adentro”. Es una alegría inmensa.

-¿Cuál fue el aspecto que más te preocupó de esta definición?

- Fui con el temor lógico de que no me pase nada. Lo que le ocurrió a Christian Ledesma en la serie es uno de los imponderables que pueden dejarte con las manos vacías. Pero gracias a Dios eso no ocurrió y es un merecido premio también para todo mi equipo, para Alcides Piatti que en su primer año con nosotros nos dio un campeonato y para Johnny Laboritto, de quien poco puedo decir que ya no se haya dicho.

- ¿Qué te pareció el gesto de Ledesma de parar a saludarte frente a La 15?

- Creo que tenemos que destacar todos lo que hizo Christian. Soy de remarcar mucho estas cosas. Cuando me ha tocado perder también he ido a saludar a mis rivales y esta vez Christian demostró ser un deportista de ley y me sentí muy orgulloso de haber peleado el título con él.

- ¿Y ahora, qué?

-Primero a pensar en la definición del fin de semana del Turismo Nacional porque también quiero ese campeonato. Y después tengo el sueño de ser campeón de tres categorías en un año. En 2014 me faltó ser competitivo en el Súper TC 2000, pero siempre tengo ese anhelo.

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