07 Diciembre 2014
ARTESANO. Nahuel y su padre tienen un emprendimiento comercial en su casa. la gaceta / foto de inés quinteros orio
Juventud, divino tesoro. A los 20 años, Nahuel Abregú vive momentos únicos, tanto en lo personal como en lo deportivo. El golero de Sportivo sabe que está a horas de vivir una situación que lo puede marcar para toda la vida. Llegar a disputar una final del Anual liguista no es algo que no se consigue todos los días. Por eso quiere aprovechar la chance que la vida le otorga cuando recién comienza su carrera futbolistica.
Abregú confiesa que vive una situación inédita en su vida. “Mis compañeros están tratando que maneje las cosas con mayor tranquilidad. Aunque la mayoría de este plantel ya tuvo la posibilidad de jugar la final de 2011 frente a Deportivo Aguilares, no podemos evitar estar ansiosos. En ese momento tenía 17 años y era el arquero suplente. Ahora es totalmente diferente, porque jugué todos los encuentros del 2014. Esto me permitió lograr regularidad en mi juego”, dijo el arquero que no quiso dejar de resaltar la importancia que tuvieron Alberto Marti Víctor Concha y Luciano Carabajal en este presente que lo llena de dicha.
El arquero considera que Sportivo llegó a esta instancia por méritos propios. “Debemos mejorar mucho respecto a lo que hicimos frente a Deportivo Aguilares, para quedarnos con el título. Respetamos a La Florida, pero sabemos que si podemos recuperar el nivel que mostramos en la fase clasificatoria, vamos a tener grandes chances de darle esa alegría a nuestra hinchada”, dijo.
Abregú resaltó lo importante que significó el trabajo que desde hace muchos años se viene realizando en las inferiores. “La base de este plantel lo formaron Salvador Felipe Mónaco y Martín Anastacio. Ahora Víctor Concha nos está dando minutos de juego a quienes venimos jugando junto desde las inferiores ”, dijo el juvenil arquero que trabaja junto a su padre Marcelo, en la fabricación artesanal de golosinas.
“Los hacemos en mi casa de El Colmenar. Gracias a Dios estamos progresando. De lunes a viernes de 8.30 hasta las 14 salimos a repartirlos a los clientes que tenemos en las ciudades de Famaillá, Los Ralos, Bella Vista y La Florida”, comentó.
Abregú confiesa que vive una situación inédita en su vida. “Mis compañeros están tratando que maneje las cosas con mayor tranquilidad. Aunque la mayoría de este plantel ya tuvo la posibilidad de jugar la final de 2011 frente a Deportivo Aguilares, no podemos evitar estar ansiosos. En ese momento tenía 17 años y era el arquero suplente. Ahora es totalmente diferente, porque jugué todos los encuentros del 2014. Esto me permitió lograr regularidad en mi juego”, dijo el arquero que no quiso dejar de resaltar la importancia que tuvieron Alberto Marti Víctor Concha y Luciano Carabajal en este presente que lo llena de dicha.
El arquero considera que Sportivo llegó a esta instancia por méritos propios. “Debemos mejorar mucho respecto a lo que hicimos frente a Deportivo Aguilares, para quedarnos con el título. Respetamos a La Florida, pero sabemos que si podemos recuperar el nivel que mostramos en la fase clasificatoria, vamos a tener grandes chances de darle esa alegría a nuestra hinchada”, dijo.
Abregú resaltó lo importante que significó el trabajo que desde hace muchos años se viene realizando en las inferiores. “La base de este plantel lo formaron Salvador Felipe Mónaco y Martín Anastacio. Ahora Víctor Concha nos está dando minutos de juego a quienes venimos jugando junto desde las inferiores ”, dijo el juvenil arquero que trabaja junto a su padre Marcelo, en la fabricación artesanal de golosinas.
“Los hacemos en mi casa de El Colmenar. Gracias a Dios estamos progresando. De lunes a viernes de 8.30 hasta las 14 salimos a repartirlos a los clientes que tenemos en las ciudades de Famaillá, Los Ralos, Bella Vista y La Florida”, comentó.
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