01 Noviembre 2014
En 2015, el gasto público crecerá un 36,8%
El 53% de las partidas corresponderán al pago de las remuneraciones de los casi 75.000 empleados de la administración estatal. La incidencia de la deuda El Poder Ejecutivo estima que los ingresos crecerán al mismo ritmo que las erogaciones, para cerrar el año con un leve superávit fiscal
DECISIÓN. En la Casa de Gobierno sostienen que se busca el equilibrio fiscal. la gaceta / foto de inés quinteros orio
Más de la mitad del gasto público previsto por el Gobierno de Tucumán para 2015 se destinará a las remuneraciones de los más de 75.000 empleados de la administración pública, según el proyecto de Presupuesto elevado ayer por el Poder Ejecutivo a la Legislatura.
El gobernador José Alperovich ha pautado gastos por $ 31.411 millones para su último año de gestión, de los cuales el 53% se destinará a las erogaciones de Personal. “El reajuste contempla la anualización de los incrementos salariales otorgados durante este año, además de considerar el crecimiento vegetativo del plantel estatal”, se explicó desde el Ministerio de Economía. No obstante, no se estableció de cuánto será la partida que el Ejecutivo tiene previsto destinar a las próximas paritarias.
En efecto, el gasto público de Tucumán crecerá casi al mismo ritmo que la inflación estimada por las consultoras privadas: la suba será de un 36,8% respecto del nivel de erogaciones pautados para este año y que originalmente fue de casi $ 23.000 millones. En septiembre, Alperovich solicitó a la Cámara la ampliación presupuestaria por unos $ 2.000 millones más. De todas maneras, se prevé que el año entrante haya un superávit de $ 7,1 millones.
Como suele suceder todos los años, la Casa de Gobierno adoptó las mismas pautas macroeconómicas trazadas por el Poder Ejecutivo nacional: una variación de precios del 15,6%, en un contexto de crecimiento del PBI real del orden del 2,8%, de un PBI nominal expandiéndose en torno de un 19% y con un tipo de cambio de $ 9,45 por dólar. La iniciativa fue girada dentro del plazo establecido por la Constitución, es decir, el último día de octubre de cada año.
En el cálculo de recursos, el Ejecutivo ha proyectado un total de $ 31.418 millones, con el siguiente detalle del origen de los fondos:
• Del total, $ 27.810 millones corresponden a recursos corrientes. La Nación aportará, vía coparticipación federal de impuestos, unos $ 18.333 millones, mientras que la provincia prevé generar $ 7.770 millones a través de la recaudación de impuestos. Otros $ 1.707 millones corresponden a aportes del Estado Nacional.
• Por recursos de capital, la Provincia proyecta generar $ 3.608 millones, de los cuales, $ 2423 millones corresponderán a transferencias provinciales.
El aumento del nivel de recursos está en línea con la velocidad de crecimiento del gasto público, es decir, una expansión interanual del 36,8%.
La deuda
El Gobierno nacional no ha dado aún pautas claras acerca del esquema que empleará para refinanciar, el año que viene, la deuda que las provincias mantienen con la administración central.
Por esa razón, el Poder Ejecutivo ha previsto en el proyecto una amortización del endeudamiento de unos $ 476,5 millones.
El pasivo de la provincia, de acuerdo con las estimaciones oficiales, ronda los $ 4.000 millones, poco más de un 12% del total de gastos presupuestados para el año que viene.
De todos modos, el Presupuesto Nacional 2015 incluye el Programa de Sustentabilidad de las Finanzas Públicas Provinciales, por $ 9.365 millones, cifra que permitiría más del 100% del flujo de servicios de la deuda reprogramada en el marco del Programa Federal de Desendeudamiento Provincial ($ 8.259 millones), quedando un remanente de $ 1.100 millones que podría ser destinado a aportar financiamiento directo a jurisdicciones con dificultades financieras.
Este año, esa partida fue de $ 9.000 millones. Asimismo, la Casa Rosada ha establecido un esquema de refinanciación trimestral de la deuda que mantienen las provincias, pero condicionada a la presentación de indicadores vinculados con el crecimiento del gasto público, el movimiento de cuentas estatales y el crecimiento de la población estatal, entre otros indicadores financieros.
En la presentación de la iniciativa, el Poder Ejecutivo sostiene que la Provincia resguardará el cumplimiento de las metas de comportamiento fiscal asumidos por la adhesión a la Ley de Responsabilidad Fiscal.
“Además, se profundizará el esfuerzo para asegurar el equilibrio fiscal y la atención oportuna de las funciones del Estado y sus obligaciones”, sostiene.
El gobernador José Alperovich ha pautado gastos por $ 31.411 millones para su último año de gestión, de los cuales el 53% se destinará a las erogaciones de Personal. “El reajuste contempla la anualización de los incrementos salariales otorgados durante este año, además de considerar el crecimiento vegetativo del plantel estatal”, se explicó desde el Ministerio de Economía. No obstante, no se estableció de cuánto será la partida que el Ejecutivo tiene previsto destinar a las próximas paritarias.
En efecto, el gasto público de Tucumán crecerá casi al mismo ritmo que la inflación estimada por las consultoras privadas: la suba será de un 36,8% respecto del nivel de erogaciones pautados para este año y que originalmente fue de casi $ 23.000 millones. En septiembre, Alperovich solicitó a la Cámara la ampliación presupuestaria por unos $ 2.000 millones más. De todas maneras, se prevé que el año entrante haya un superávit de $ 7,1 millones.
Como suele suceder todos los años, la Casa de Gobierno adoptó las mismas pautas macroeconómicas trazadas por el Poder Ejecutivo nacional: una variación de precios del 15,6%, en un contexto de crecimiento del PBI real del orden del 2,8%, de un PBI nominal expandiéndose en torno de un 19% y con un tipo de cambio de $ 9,45 por dólar. La iniciativa fue girada dentro del plazo establecido por la Constitución, es decir, el último día de octubre de cada año.
En el cálculo de recursos, el Ejecutivo ha proyectado un total de $ 31.418 millones, con el siguiente detalle del origen de los fondos:
• Del total, $ 27.810 millones corresponden a recursos corrientes. La Nación aportará, vía coparticipación federal de impuestos, unos $ 18.333 millones, mientras que la provincia prevé generar $ 7.770 millones a través de la recaudación de impuestos. Otros $ 1.707 millones corresponden a aportes del Estado Nacional.
• Por recursos de capital, la Provincia proyecta generar $ 3.608 millones, de los cuales, $ 2423 millones corresponderán a transferencias provinciales.
El aumento del nivel de recursos está en línea con la velocidad de crecimiento del gasto público, es decir, una expansión interanual del 36,8%.
La deuda
El Gobierno nacional no ha dado aún pautas claras acerca del esquema que empleará para refinanciar, el año que viene, la deuda que las provincias mantienen con la administración central.
Por esa razón, el Poder Ejecutivo ha previsto en el proyecto una amortización del endeudamiento de unos $ 476,5 millones.
El pasivo de la provincia, de acuerdo con las estimaciones oficiales, ronda los $ 4.000 millones, poco más de un 12% del total de gastos presupuestados para el año que viene.
De todos modos, el Presupuesto Nacional 2015 incluye el Programa de Sustentabilidad de las Finanzas Públicas Provinciales, por $ 9.365 millones, cifra que permitiría más del 100% del flujo de servicios de la deuda reprogramada en el marco del Programa Federal de Desendeudamiento Provincial ($ 8.259 millones), quedando un remanente de $ 1.100 millones que podría ser destinado a aportar financiamiento directo a jurisdicciones con dificultades financieras.
Este año, esa partida fue de $ 9.000 millones. Asimismo, la Casa Rosada ha establecido un esquema de refinanciación trimestral de la deuda que mantienen las provincias, pero condicionada a la presentación de indicadores vinculados con el crecimiento del gasto público, el movimiento de cuentas estatales y el crecimiento de la población estatal, entre otros indicadores financieros.
En la presentación de la iniciativa, el Poder Ejecutivo sostiene que la Provincia resguardará el cumplimiento de las metas de comportamiento fiscal asumidos por la adhesión a la Ley de Responsabilidad Fiscal.
“Además, se profundizará el esfuerzo para asegurar el equilibrio fiscal y la atención oportuna de las funciones del Estado y sus obligaciones”, sostiene.
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