Cada vez más cerca del Bicentenario

Cada vez más cerca del Bicentenario

Hay aniversarios significativos en la vida de las personas y de los pueblos, cuyos festejos exceden lo cotidiano, lo común. Son momentos en los que “se tira la casa por la ventana”, como señala la expresión popular. Las celebraciones demandan un tiempo prudencial de preparación y generalmente, se busca que quede algún recuerdo importante. Tucumán tendrá esa oportunidad el 9 de julio de 2016, porque se convertirá en el centro de las celebraciones del bicentenario de la declaración de la independencia argentina.

Por esa razón, teniendo en cuenta que el tiempo transcurre rápidamente, con buen criterio, el 15 de marzo de 2006, la Legislatura sancionó la ley provincial N° 7649, por la que se creaba el Ente Provincial Bicentenario Tucumán 2016, con carácter de entidad autárquica, con patrimonio propio y con plena capacidad para ejercer derechos y contraer obligaciones, que se relacionaría con el Poder Ejecutivo a través de la Secretaría General de la Gobernación.

Un lector recordó hace pocos días en nuestra sección Cartas que la iniciativa prescribía como objetivos, entre otros puntos, la construcción de un monumento al Bicentenario de la Independencia Argentina; la creación de un logotipo, isotipo o isologotipo oficial, así como de un Himno del Bicentenario. Proponía la emisión de estampillas, la publicación de libros, la creación de monedas recordatorias sin curso legal, la filmación de películas, la distinción a herederos de los congresistas. Se aconsejaba la revalorización integral de los aspectos urbanísticos, ambiental, histórico cultural y artístico en todo el ámbito provincial, así como la adecuación de infraestructura turística, deportiva, vial, de seguridad y transporte. Sin embargo, el directorio nunca se constituyó y la ley 7.649 quedó en el olvido. “¿Quién es el responsable de este doloso abandono? Es evidente que al gobernador no le interesa ya que para esa fecha estará ‘ido’ y es vergonzoso que tampoco le interese la publicitada visita del papa Francisco, 15 días antes de la fecha patria, para asistir al Congreso Eucarístico. ¿Y el intendente municipal? También estará “ido”, pero no se ocupa de preparar su ciudad”, sostenía el lector Ángel Salguero (22/10).

Aunque los tiempos se acortan velozmente, todavía se puede cumplir con la mayoría de los objetivos fijados por la norma. Como hemos señalado en alguna oportunidad, podría pensarse también editar una antología de escritores tucumanos o un libro interactivo que reuniera la obra de nuestros maestros de la pintura, así como los consagrados en los últimos años, o editar CDs que reunieran a nuestros mejores intérpretes en todos los géneros musicales. Este material también podría incluirse en las exposiciones a las que fuera invitada la provincia y distribuirse en las escuelas, colegios y universidades, de manera que los mismos comprovincianos sepan quiénes son sus artistas.

Tal vez sea un poco tarde para encarar alguna obra de envergadura que quede en la historia como un símbolo de este bicentenario, pero el gobierno local aún puede solicitar la ayuda de la Nación, teniendo en cuenta que a lo largo de más de 10 años ha contado con su constante apoyo económico, para proyectar un celebración con dignidad. Se trata de una fiesta de todos los argentinos, pero en particular de los tucumanos que tendrán la posibilidad de mostrar ante los ojos de una buena parte del mundo sus virtudes.

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