31 Octubre 2014
COMERCIALIZACIÓN. Los productores de trigo argentino piden que se acelere o libere la exportación de los excedentes. reuters
La oferta del trigo pampeano, que este año fue mínima, sería de unos 5,5 millones de toneladas, más otras 750.000 t de harina. Pero los negocios podrían malograrse si el Gobierno nacional vuelve a demorar la aprobación de los permisos de embarque.
El análisis sobre las chances argentinas de recuperar su principal mercado triguero (en los últimos años, por falta de oferta local, Brasil tuvo que importar el cereal de Rusia, Ucrania, EEUU o Canadá), fueron lanzadas en el 21 Congreso de Abitrigo por el titular del Centro de Corredores de Cereales, Javier Buján.
Frente a los principales importadores del vecino país, afirmó que se espera un crecimiento de la cosecha del 14% y que la oferta sería suficiente para multiplicar “tres veces y media” la oferta de este año.
Según datos oficiales, Argentina exportó a Brasil en 2013 solo 2,1 millones de t, mientras que en el primer semestre de 2014 superó el millón. La demanda de Brasil, el mayor importador mundial, es superior: entre 5 y 7 millones de t.
Los pronósticos de Buján coinciden con los de las grandes bolsas de cereales del país. La de Rosario calculó que se sembraron 4,36 millones de ha de trigo y se cosecharían 12 millones de t. La de Buenos Aires, más moderada, estimó 4,1 millones y 11,5 millones, respectivamente. En cualquier caso, habría un saldo exportable de 5 o 6 millones de t.
El Gobierno -que aún no habilitó permisos de exportación para el trigo que ya se cosecha- es más optimista: calcula que el área sembrada trepó a 4,6 millones de ha. Si el rinde fuera el histórico promedio, la producción rozaría los 13 millones de toneladas.
El análisis sobre las chances argentinas de recuperar su principal mercado triguero (en los últimos años, por falta de oferta local, Brasil tuvo que importar el cereal de Rusia, Ucrania, EEUU o Canadá), fueron lanzadas en el 21 Congreso de Abitrigo por el titular del Centro de Corredores de Cereales, Javier Buján.
Frente a los principales importadores del vecino país, afirmó que se espera un crecimiento de la cosecha del 14% y que la oferta sería suficiente para multiplicar “tres veces y media” la oferta de este año.
Según datos oficiales, Argentina exportó a Brasil en 2013 solo 2,1 millones de t, mientras que en el primer semestre de 2014 superó el millón. La demanda de Brasil, el mayor importador mundial, es superior: entre 5 y 7 millones de t.
Los pronósticos de Buján coinciden con los de las grandes bolsas de cereales del país. La de Rosario calculó que se sembraron 4,36 millones de ha de trigo y se cosecharían 12 millones de t. La de Buenos Aires, más moderada, estimó 4,1 millones y 11,5 millones, respectivamente. En cualquier caso, habría un saldo exportable de 5 o 6 millones de t.
El Gobierno -que aún no habilitó permisos de exportación para el trigo que ya se cosecha- es más optimista: calcula que el área sembrada trepó a 4,6 millones de ha. Si el rinde fuera el histórico promedio, la producción rozaría los 13 millones de toneladas.
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