30 Octubre 2014
La preocupación de los vecinos de varios barrios de Concepción por la calidad y cantidad de agua corriente no es nueva. Desde 2006 vienen reclamando a las autoridades un mejor servicio. Y, desde entonces, también desde el Concejo Deliberante piden celeridad para solucionar los problemas.
El concejal radical Eduardo Carrizo consideró que el principal inconveniente de la ciudad ahora no son los pozos sino la falta de inversión en nuevas cañerías. “Nos preguntamos para qué nos sirven los pozos si la presión sigue en falta debido a las numerosas roturas que tiene la red. Lo que se impone es hacer una inversión muy fuerte por bajo tierra. En la actualidad lo que pasa es lamentable porque el agua está en las calles y no en los grifos”, se quejó.
“Concepción experimentó un crecimiento demográfico muy grande, que no fue acompañando por la inversión correspondiente. Hoy tenemos una cañería muy vieja. La reserva de agua que tiene la SAT en un tanque no se puede usar porque si sueltan el líquido se revientan todas las cañerías”, señaló.
Por otro lado, Carrizo comentó que muchos vecinos de Concepción tienen incertidumbre respecto del agua que consumen. Hace ocho años, cuando los vecinos reclamaron que el agua salía del caño turbia, se comprobó que el líquido contenía mercurio en un nivel del 160% más alto que el indicado por el Código Alimentario Nacional. En esos tiempos, el consumo de agua mineral había aumentado un 200% en la Perla del Sur. “Después de un tiempo se determinó que era un problema relacionado al cloro con el que potabilizaban el agua. Pero las autoridades nunca nos informaron cómo mejoraron los sistemas de potabilización ni cómo se hace hoy en día”, dijo Carrizo.
Según una publicación de 2007 en nuestro diario, expertos de la Comisión de Energía Atómica y de la Estación Experimental Obispo Colombres -que estuvieron a cargo de la investigación del estado del agua en Concepción- dictaminaron que el líquido no estaba contaminado y que era potable.
El concejal radical Eduardo Carrizo consideró que el principal inconveniente de la ciudad ahora no son los pozos sino la falta de inversión en nuevas cañerías. “Nos preguntamos para qué nos sirven los pozos si la presión sigue en falta debido a las numerosas roturas que tiene la red. Lo que se impone es hacer una inversión muy fuerte por bajo tierra. En la actualidad lo que pasa es lamentable porque el agua está en las calles y no en los grifos”, se quejó.
“Concepción experimentó un crecimiento demográfico muy grande, que no fue acompañando por la inversión correspondiente. Hoy tenemos una cañería muy vieja. La reserva de agua que tiene la SAT en un tanque no se puede usar porque si sueltan el líquido se revientan todas las cañerías”, señaló.
Por otro lado, Carrizo comentó que muchos vecinos de Concepción tienen incertidumbre respecto del agua que consumen. Hace ocho años, cuando los vecinos reclamaron que el agua salía del caño turbia, se comprobó que el líquido contenía mercurio en un nivel del 160% más alto que el indicado por el Código Alimentario Nacional. En esos tiempos, el consumo de agua mineral había aumentado un 200% en la Perla del Sur. “Después de un tiempo se determinó que era un problema relacionado al cloro con el que potabilizaban el agua. Pero las autoridades nunca nos informaron cómo mejoraron los sistemas de potabilización ni cómo se hace hoy en día”, dijo Carrizo.
Según una publicación de 2007 en nuestro diario, expertos de la Comisión de Energía Atómica y de la Estación Experimental Obispo Colombres -que estuvieron a cargo de la investigación del estado del agua en Concepción- dictaminaron que el líquido no estaba contaminado y que era potable.
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