La educación privada creció en todo el país, menos en Tucumán

La educación privada creció en todo el país, menos en Tucumán

El gobierno nacional abrió muchas escuelas en la Provincia pero no actualiza los aportes a los colegios desde hace 20 años.Visión de un dirigente nacional

EN TUCUMÁN. Lentijo, de Adeepra. la gaceta / foto de magena valentie EN TUCUMÁN. Lentijo, de Adeepra. la gaceta / foto de magena valentie
29 Octubre 2014
La Educación pública es una sola en todo el país, sólo cambia la gestión, que puede ser estatal o privada. Sin embargo, los programas nacionales no bajan a todas las escuelas por igual. Las privadas, por más función social que cumplan en los sectores más pobres de la sociedad, son excluidas de proyectos de inclusión como el de Conectar Igualdad, que repartió más de 4,6 millones de netbooks en todo el país. Perpetuo Lentijo, secretario general de la Asociación de Entidades Educativas Privadas Argentinas (Adeepra) se preguntó si esto no es discriminación.

El especialista vino a Tucumán invitado por Asipet para dictar una jornada de capacitación en el instituto Nicolás Avellaneda. Lentijo señaló que en los últimos 20 años los colegios privados han crecido en todo el país. El 26,6%, es decir, un cuarto de la matrícula nacional, pertenece al sector privado, según un estudio realizado por la Confederación Argentina de Instituciones Educativas Privadas (Caiep), de la que Lentijo es vicepresidente. El trabajo se efectuó a cumplirse 20 años de la transferencia de los servicios educativos a las provincias. Lentijo dijo que si bien hay crecimiento, todavía un gran sector de la población no puede elegir la educación que quiere para sus hijos por falta de apoyo del Estado a la Educación Privada. Recordó que cada colegio tiene su ideario y pone el acento en una determinada formación. El aporte del Estado sirve para hacer más accesible esos servicios a la población.

El apoyo de los gobiernos provinciales ha sido desigual. “En Catamarca el 100% de los colegios privados ha sido subvencionado, en forma total, entonces todos han podido bajar sus aranceles y hacerlos accesibles a la población”, destacó. Aunque hay que tener en cuenta que Catamarca tiene 40 privados, en cambio Tucumán tiene 300 y Buenos Aires, más de 7.000. “En Tucumán es histórico el hecho de que nunca se reconoce el crecimiento vegetativo de los colegios por lo que el aporte del Estado queda desactualizado”, acotó.

En cifras
La educación privada tiene fuerte presencia en los niveles inicial y superior con un 25 y un 47%, respectivamente, en todo el país. En el primer caso, podría ser mucho mayor si el gobierno hiciera un mejor control de los jardines maternales, dijo. “El nivel superior es el que más ha crecido en el sector privado por su diversidad de oferta que el Estado no puede cubrir ya que debe dar estabilidad al docente, en cambio el régimen de los privados es más flexible”, añadió. En los niveles primario y secundario, los alumnos privados representan el 25% y el 30%. En Capital Federal, el 47%; y en la provincia de Buenos Aires, el 33%.

“Hay una creciente elección por la educación privada porque es un modelo paidocéntrico, se centra en la necesidad del alumno, en cambio la gestión estatal es magistocéntrico, porque en centro son las necesidades del docente”, dijo Lentijo. Ejemplificó: “en la escuela estatal, cuando hay que cubrir una vacante, se espera a que manden a un docente de un listado y mientras tanto el chico está sin clases. En cambio en el privado faltó el docente y un suplente que lo reemplaza el mismo día”.

Sin embargo lamentó que “los colegios privados están pasando por momentos de crisis económicos porque no hay reinversión. Los edificios y los laboratorios no tienen mantenimiento, porque por encima está la limitación de las familias y un Estado que no apoya lo suficiente”. Pero aclaró que pese a la grave situación no hubo cierre de colegios, “sí estatización -dijo-, con lo cual el Estado ha hecho un gran negocio, porque tiene un edificio, un equipo docente armado y lo único que tiene que hacer es tomar posesión”.

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