Separan a un fiscal de la investigación de un accidente

Un fiscal fue apartado de la investigación de un accidente en el que fallecieron dos personas por no haber tomado medidas ni haber avanzado en el caso. La orden provino del ministro Fiscal Edmundo Jiménez, quien incluso podría sancionarlo, en caso de constatar que existió una conducta inadecuada de parte del funcionario judicial. Se trata de Jorge Ariel Carrasco, a cargo de la Fiscalía de Instrucción de la II° Nominación del Centro Judicial Monteros.

Carrasco estaba de turno cuando ocurrió el hecho en cuestión. La noche del 23 de septiembre, una pareja circulaba en una moto por la ruta provincial 329, a la altura de la comuna La Ciudacita, cuando fue arrollada por una rastra cañera. Oscar Argañaraz y Mercedes Barcelo murieron, tras ser arrastrados 600 metros.

La semana pasada, Jiménez citó al fiscal en su despacho para que le informara qué avances había en la investigación. Carrasco no pudo asistir -argumentó que estaba cursando un posgrado en Santiago del Estero- y en su lugar acudió su secretario, Juan Carlos Medina Rosales. De acuerdo a los considerandos de la Resolución N°38 de Ministerio Fiscal, Medina Rosales explicó que le había tomado declaración al conductor del tractor (Héctor Candelario Díaz), quien relató que sintió un ruido y paró, para luego desenganchar la moto del acoplado donde había quedado atrapada y dejarla al costado de la ruta. Luego -agregó el chofer- se dirigió a la finca de “los mellizos Cruz”, para quienes trabaja. Allí le contó a su patrón (Ángel Hernán Cruz) lo que había sucedido y este guardó el vehículo en un galpón.

En su declaración, Díaz agregó -según reprodujo Medina Rosales- que al día siguiente, cuando su patrón se encontró con una consigna policial, informó que su chofer había tenido un accidente y puso al rodado a disposición de la Justicia. En ese sentido, el secretario fiscal aseguró que se solicitaron pericias al vehículo.

Pese a las directivas impartidas por Jiménez de acelerar la investigación, el fiscal Carrasco le comunicó el lunes que no se le había tomado declaración a nadie como imputado y que no había pedido medidas privativas de la libertad para nadie. “Es evidente la desidia en la actividad desarrollada tanto por el fiscal como por el ayudante fiscal”, consideró Jiménez. Y añadió: “no debe olvidarse que existen dos víctimas fatales, que ni al fiscal ni al ayudante fiscal les interesó, conforme a su obrar en las actuaciones. Por ello resuelvo disponer su apartamiento de la presente causa”.

Jiménez le asignó el proceso a la fiscala de Instrucción de la I° Nominación del Centro Judicial Monteros, Mónica García de Targa, y al fiscal de Instrucción de la IV° Nominación del Centro Judicial Concepción, Edgardo Sánchez. Asimismo, les ordenó a ambos “actuar con la diligencia debida, evitar dilaciones y disponer las medidas necesarias para la correcta calificación legal del hecho”.