21 Septiembre 2014
BUZONES. Son 195 y están distribuidos en distintos puntos de la provincia.
El sistema de denuncias anónimas bautizado como “Campaña por la Vida” recolectó 145 denuncias desde que se implementó, a principios de agosto. De esas denuncias, 73 fueron descartadas, 56 serán investigadas por la Justicia Federal y 16 se derivaron para el tratamiento médico de los consumidores.
En total, se colocaron 195 urnas que fueron distribuidas entre los juzgados de Paz, las comunas rurales, los municipios y otras reparticiones públicas. La iniciativa es impulsada por la Justicia Federal, el Colegio de Abogados y el Ministerio de Seguridad Ciudadana.
Según explicó el juez Ricardo Sanjuán, las denuncias que serán investigadas por la Justicia fueron analizadas por los organismos de inteligencia de las fuerzas de seguridad. De esa manera, se descartaron aquellas donde la información aparecía repetida.
Respecto a los consumidores, para quienes sus familiares solicitaron asistencia, fueron derivados a la secretaría de Prevención y Asistencia de las Adicciones que está a cargo de Lucas Haurigot Posse. El funcionario explicó que todos los pacientes, luego de que los trabajadores sociales y los especialistas analizaran sus condiciones, quedaron bajo un régimen de atención ambulatorio. La mayoría de estos jóvenes adictos provienen de barrios de la capital, Tafí Viejo y Monteros. Según indicó Haurigot Posse, el menor de esos pacientes tiene 17 años y el mayor, 24. “Los chicos que son asistidos llegaron por el consumo de marihuana y psicofármacos que se venden bajo receta médica. No se los derivó a ninguna entidad para que se los interne porque los especialistas consideraron que no era necesario”, aclaró el funcionario.
El titular del Colegio de Abogados, Francisco Posse, señaló que en esa entidad reciben unas 100 consultas judiciales por semana, en las que surgen situaciones relacionadas con el consumo de drogas. “Colaboramos con esta campaña porque observamos que en muchos de los casos que nos toca asistir detectamos que detrás de -por ejemplo- una situación de violencia doméstica, hay uno de los integrantes de la familia que consume drogas”, precisó Posse.
La “Campaña por la Vida” sigue vigente y sus impulsores esperan avanzar en la elaboración de estadísticas y mapas que permitan delinear un bosquejo de los lugares donde se vende droga, de los barrios más afectados por este flagelo y de los grupos sociales que requieren asistencia médica.
En total, se colocaron 195 urnas que fueron distribuidas entre los juzgados de Paz, las comunas rurales, los municipios y otras reparticiones públicas. La iniciativa es impulsada por la Justicia Federal, el Colegio de Abogados y el Ministerio de Seguridad Ciudadana.
Según explicó el juez Ricardo Sanjuán, las denuncias que serán investigadas por la Justicia fueron analizadas por los organismos de inteligencia de las fuerzas de seguridad. De esa manera, se descartaron aquellas donde la información aparecía repetida.
Respecto a los consumidores, para quienes sus familiares solicitaron asistencia, fueron derivados a la secretaría de Prevención y Asistencia de las Adicciones que está a cargo de Lucas Haurigot Posse. El funcionario explicó que todos los pacientes, luego de que los trabajadores sociales y los especialistas analizaran sus condiciones, quedaron bajo un régimen de atención ambulatorio. La mayoría de estos jóvenes adictos provienen de barrios de la capital, Tafí Viejo y Monteros. Según indicó Haurigot Posse, el menor de esos pacientes tiene 17 años y el mayor, 24. “Los chicos que son asistidos llegaron por el consumo de marihuana y psicofármacos que se venden bajo receta médica. No se los derivó a ninguna entidad para que se los interne porque los especialistas consideraron que no era necesario”, aclaró el funcionario.
El titular del Colegio de Abogados, Francisco Posse, señaló que en esa entidad reciben unas 100 consultas judiciales por semana, en las que surgen situaciones relacionadas con el consumo de drogas. “Colaboramos con esta campaña porque observamos que en muchos de los casos que nos toca asistir detectamos que detrás de -por ejemplo- una situación de violencia doméstica, hay uno de los integrantes de la familia que consume drogas”, precisó Posse.
La “Campaña por la Vida” sigue vigente y sus impulsores esperan avanzar en la elaboración de estadísticas y mapas que permitan delinear un bosquejo de los lugares donde se vende droga, de los barrios más afectados por este flagelo y de los grupos sociales que requieren asistencia médica.
NOTICIAS RELACIONADAS
Lo más popular
