20 Septiembre 2014
CONSAGRADAS. Corbalán, Soria y Núñez en el estadio de Chapadmalal posan con las medallas de la Copa Argentina Sub-23.
No quieren vivir de un solo recuerdo, por eso las tres tucumanas que formaron parte de la Selección Menor Argentina que participó en la Copa Argentina Sub-23 de Chapadmalal van por más. Desde Tucumán hasta la ciudad balnearia partieron María de la Paz Corbalán y María Victoria Núñez, ambas de Fundarte; mientras que desde Buenos Aires fue Agostina Soria, defensora de los colores de Vélez.
El rendimiento de Argentina en el torneo que jugó de manera especial contra los mejores clubes de la categoría, fue superlativo. El equipo que dirige Mauro Silvestre terminó invicto, con nueve victorias en las que sumó 27 sets y perdió sólo dos.
“El objetivo no era salir campeonas”, revela para sorprender Corbalán. “Al torneo lo tomamos como una concentración más. En ellas siempre trabajamos en mejorar aspectos para el Mundial del próximo año”, sintetiza la “fundartina”.
Con esa intención concreta fue el plantel, pensando en el futuro a largo plazo, más que en una arrasadora conquista. Corbalán sumó su cuarta convocatoria, mientras que su compañera de equipo tuvo el debut soñado en una selección. “Fue mi primera vez con la Menor y sí, sinceramente, me tomó un poco de sorpresa”, afirmó Núñez.
La dama de 16 años entró varias veces a la cancha desde el banco de suplentes. “Pensaba que veníamos sólo a participar, pero no. Las jugadoras con las que compartí equipo son muy buenas y pude aprender mucho. Ahora quiero seguir mejorando para las próximas concentraciones”, dijo confiada.
En tanto para Soria, que en Tucumán defendió las camisetas de Tucumán de Gimnasia y Fundarte, la decisión que tomó en 2010 con sus padres tomó mayor sentido aún.
“Cuando quedé en Vélez dejamos todo en Tucumán. En 2013 empecé a concentrar con la Selección Pre-Menor y salimos subcampeonas en el Sudamericano de Colombia”, detalló la jugadora de 15 años.
Soria vive lo que tanto desea. “Mi sueño es vestir la celeste y blanca hasta la selección mayor”, anheló Soria que, como Corbalán y Núñez, no quiere que la magia de representar al país se corte.
El rendimiento de Argentina en el torneo que jugó de manera especial contra los mejores clubes de la categoría, fue superlativo. El equipo que dirige Mauro Silvestre terminó invicto, con nueve victorias en las que sumó 27 sets y perdió sólo dos.
“El objetivo no era salir campeonas”, revela para sorprender Corbalán. “Al torneo lo tomamos como una concentración más. En ellas siempre trabajamos en mejorar aspectos para el Mundial del próximo año”, sintetiza la “fundartina”.
Con esa intención concreta fue el plantel, pensando en el futuro a largo plazo, más que en una arrasadora conquista. Corbalán sumó su cuarta convocatoria, mientras que su compañera de equipo tuvo el debut soñado en una selección. “Fue mi primera vez con la Menor y sí, sinceramente, me tomó un poco de sorpresa”, afirmó Núñez.
La dama de 16 años entró varias veces a la cancha desde el banco de suplentes. “Pensaba que veníamos sólo a participar, pero no. Las jugadoras con las que compartí equipo son muy buenas y pude aprender mucho. Ahora quiero seguir mejorando para las próximas concentraciones”, dijo confiada.
En tanto para Soria, que en Tucumán defendió las camisetas de Tucumán de Gimnasia y Fundarte, la decisión que tomó en 2010 con sus padres tomó mayor sentido aún.
“Cuando quedé en Vélez dejamos todo en Tucumán. En 2013 empecé a concentrar con la Selección Pre-Menor y salimos subcampeonas en el Sudamericano de Colombia”, detalló la jugadora de 15 años.
Soria vive lo que tanto desea. “Mi sueño es vestir la celeste y blanca hasta la selección mayor”, anheló Soria que, como Corbalán y Núñez, no quiere que la magia de representar al país se corte.
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