Al designar los directores de YMAD primó lo ambiental, sugirió Bardón

La llegada de Faustino Siñeriz y de Alfredo Grau al Directorio de la firma Yacimiento Mineros de Agua de Dionisio (YMAD), como representantes de la Universidad Nacional de Tucumán (UNT), responde, según explicó la rectora, Alicia Bardón, a un cambio de paradigma reclamado por la comunidad universitaria y la sociedad toda. Ambos investigadores fueron designados ayer, a propuesta de Bardón, durante una sesión extraordinaria del Consejo Superior. Casi todos los consejeros avalaron los pliegos; sólo dos se abstuvieron: Graciela Navarro (representante de los no docentes) y Facundo Arias (estudiante).

“A lo largo de los últimos meses había venido conversando con los consejeros, y llegamos a un acuerdo sobre el perfil que debían tener los directores de la UNT ante YMAD, y sobre los nombres de estos”, dijo la rectora luego de la sesión. Explicó que Siñeriz es especialista en biorremediación -“implica curar ambientes contaminados”-, y que Grau es director subrogante del Instituto Ecología Regional y asesor del ministro de Ciencia y Tecnología de la Nación, Lino Barañao, en temas de biodiversidad y de sustentabilidad ambiental. “Científicamente, ambos tienen mucho que aportar a YMAD”, afirmó.

Ante la pregunta de por qué no se había designado al ex rector Juan Alberto Cerisola -pese a los rumores que circularon y a que ya venía representando, en forma interina, a la UNT en YMAD-, Bardón prefirió insistir en los motivos por los cuales había elegido a Siñeriz y a Grau. “La propuesta tiene que ver con el perfil que el Consejo Superior me había manifestado, respecto de la preocupación ambiental que docentes, no docentes, alumnos y egresados hicieron llegar a sus representantes en el cuerpo”, dijo.

En efecto, durante la sesión varios consejeros opinaron sobre la necesidad de abrir un debate que contemple la cuestión medioambiental, vinculada con la explotación minera. Lo hicieron durante el tratamiento del otro punto por el cual se había citado la sesión: un proyecto de reglamento de la participación de los directores, por parte de la UNT, en YMAD.

El texto, propuesto por la rectora, fue aprobado en general, y será discutido en particular -artículo por artículo- en una reunión plenaria de las tres comisiones del cuerpo que se realizará desde las 8.30 del viernes. Entre otros, el proyecto establece un tope para los salarios que perciben los directores de la UNT en YMAD. “El monto de los honorarios netos no podrá superar el sueldo bruto que perciba un profesor titular, con dedicación exclusiva y máxima antigüedad. El excedente deberá ser donado a la UNT”, dice el artículo 4°. “Durante mucho tiempo hubo dudas en cuanto a los honorarios de los representantes de la UNT en las empresas privadas. Me sugirieron que las donaciones se destinen a las bibliotecas, a los centros de cómputos; que se beneficien nuestros alumnos”, dijo Bardón.

La decana Adela Seguí (Derecho) criticó puntos del proyecto. “Me hace ruido la cláusula de confidencialidad; podría violar la Ley de Administración de los Recursos Públicos”, dijo. Pidió que se redacten de otro modo incisos del artículo 7°. Por ejemplo, el inciso “D” dice que los directores deben informar al rector hechos que puedan acarrear perjuicios a la UNT. Seguí propuso se obligue a informar esto al Superior. El titular de Asuntos Jurídicos, Augusto González Navarro, admitió que los aportes tenían asidero.

Sobre la necesidad de que el reglamento ahonde en cuestiones ambientales se pronunciaron, entre otros, los decanos Mercedes Leal (Filosofía) y Sergio Pagani (Exactas), y los consejeros Marcela Colombo y Daniel Yépez (Asociados y Adjuntos) y Arias. “Es muy cuestionable la minería a cielo abierto. Está prohibida en Tucumán, y universidades nacionales la cuestionaron. Debemos fijar fecha para ese debate”, dijo Colombo. Bardón se mostró de acuerdo, y dio a entender que la UNT podría organizar conferencias de expertos sobre este tema.