Una divertida aventura espacial

Una divertida aventura espacial

El aventurero Peter Quill es perseguido por un cazarrecompensas después de robar una misteriosa esfera. Para poder escapar del acecho, Quill se ve obligado a pactar una tregua con un cuarteto de inadaptados con el que conforma un grupo de lucha. Pero, poco a poco se da cuenta que el poder de esa esfera pone en peligro a todo el universo.

Guardianes de la galaxia | Acción, ciencia ficción - SAM 13, 121’

El universo de los superhéroes se expande. Ya no se trata sólo de los exitosos y archiconocidos personajes de Marvel como el Hombre Araña, Thor, Iron Man o el Capitán América. Ahora se sube al podio de la fama un grupo casi desconocido de renegados que nació en enero de 1969 y que seguramente se va a convertir en el nuevo “dream team” de Marvel. No tanto por su historia dentro del comic, sino por la manera en la que debutaron en Hollywood: con mucho humor y una producción ambiciosa que no reparó en gastos. La película tiene, por supuesto, el sello ineludible de Disney. Es decir, está dirigida a ese público que va de los 8 a los 15 años. Y, por lo tanto, todo el humor que derrochan las escenas tiene un guiño adolescente.

Eso no quiere decir que los adultos no podrán disfrutar de la película. De hecho, el protagonista de la historia es Peter Quill (Chris Pratt), un cazarrecompensas oriundo de la Tierra, carismático, atractivo y gracioso, que inevitablemente hace recordar a aquel Hans Solo de “La guerra de las galaxias” o al Indiana Jones de Steven Spielberg; ambos, interpretados por Harrison Ford. Y es justamente esta estética de los 80, tan propia de George Lucas y del mismo Spielberg, la que convierte a “Guardianes de la galaxia” en un producto que se puede disfrutar plenamente en familia.

La historia es sencilla y se toma su tiempo para narrar el pasado triste de Peter Quill, quien con los años se convierte en un ladrón rompecorazones llamado Stard-Lord. Con él están Gamora (Zoe Saldana, convertida ya en un experta en roles extraterrestres), el gigante musculoso Drax (Dave Bautista) y dos criaturas “digitales”: el arbóreo Groot (con la voz de Vin Diesel que se limita a decir “Soy Groot”) y el cínico e inteligente mapache Rocket Raccoon (con la voz de Bradley Cooper). Este último personaje es, tal vez, el que más lucimiento tiene después de Quill. Generado íntegramente por computadora, Raccoon hace las delicias de la platea y, seguramente, ocupará un lugar en el panteón de los grandes personajes digitales, junto a Gollum de “El señor de los anillos” y a César de “El planeta de los simios: confrontación”.

Una mención aparte merece la banda sonora, compuesta por éxitos de los ’70, que van de “Cherry bomb”, de The Runaways, hasta “Hooked on a feeling”, de Blue Swede, el tema que le otorga un sello particular al filme.

En definitiva: “Guardianes de la galaxia” tal vez no sea la mejor de las películas de Marvel, pero sin lugar a dudas pasará a la historia como la más alocada, divertida y ocurrente aventura basada en un cómic.

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