29 Julio 2014
REMODELACION. El ex sanatorio prestará funciones para el Siprosa. Por ahora, solamente se harán cirugías. la gaceta / foto de inés quinteros orio
A 16 años de su cierre definitivo y tras varias postergaciones, el ex sanatorio ADOS volverá a abrir sus puertas mañana. Rebautizado como “Hospital de Día Néstor Kirchner”, integra ahora el Sistema Provincial de Salud (Siprosa).
“Es una obra de infraestructura de excelencia. Resume lo que viene pasando en Tucumán en estos últimos 10 años: a algo que estaba abandonado y en desuso, hoy lo vemos en todo su esplendor. Tendrá tecnología de punta y personal altamente calificado”, celebró el ministro de Salud nacional, Juan Manzur.
El acto, que se hará durante la mañana, será encabezado por Manzur, por el gobernador José Alperovich y por las autoridades nacionales del PAMI.
El ministro de Salud provincial, Pablo Yedlin, detalló ayer que el centro sanitario se pondrá en funcionamiento por etapas. La primera incluye la apertura del centro quirúrgico que permitirá “descongestionar” las listas de espera de los quirófanos de los hospitales centrales.
“El jueves, los pacientes estarán haciéndose los (análisis) prequirúrgicos y el lunes se concretarán las primeras cirugías ambulatorias”, adelantó Yedlin. De acuerdo con las previsiones del Ministerio, en los cinco quirófanos podrían realizarse 50 cirugías por día y hasta 1.000 por mes (oftalmológicas, otorrinolaringológicas, urológicas, vasculares periféricas, ginecológicas, traumatológicas y plásticas y reparadoras). Los pacientes que sean operados se retiraran a su hogar en el día; es decir, no serán internados.
El Hospital Néstor Kirchner no tendrá los llamados consultorios de “demanda espontánea”. Los enfermos llegarán derivados desde otras instituciones del Siprosa, según detallaron las autoridades.
En las futuras tres etapas de apertura -la próxima sería en octubre- quedarían habilitados el servicio de odontología de alta complejidad; el laboratorio central de Salud Pública y el servicio de Hemato-oncología para adultos, de acuerdo con lo que enumeró Yedlin.
Según datos oficiales, se invirtieron unos $ 67 millones en la refuncionalización ($ 36 millones en la obra civil, $ 2 millones en el inmueble y $ 29 millones en el equipamiento completo). Se estima que el gasto mensual será de $ 10 millones, entre personal e insumos.
En tanto, el plantel que trabajará en esta instancia está conformado por 120 empleados. Se espera que, en total, se emplee a 350. La dirección está a cargo del médico Samuel Semrik.
El sanatorio ADOS, en Mendoza segunda cuadra, fue un hito en el sistema sanitario local. Había sido el edificio principal de la Asociación de Obras Sociales -de ahí sus siglas-, desde 1972. Había nacido por iniciativa de una veintena de sindicatos; fue intervenido durante la dictadura en los 70’; vivió su esplendor y fue carcomido por la inflación en los 80 y quebró. Fue reabierto, sin éxito, en los 90.
Tras ese derrotero, el edificio permaneció cerrado hasta que, en 2006, el Estado lo compró. En 2009, la Provincia firmó un acuerdo con el PAMI: la obra social financiaría las obras a cambio de prestaciones para sus afiliados durante 10 años (en instituciones del Siprosa). En ese entonces, Alperovich anunció que el plazo de los trabajos era de 18 meses y que sería inaugurado a fines de 2010. Lo mismo fue prometido cada año desde entonces.
“Es una obra de infraestructura de excelencia. Resume lo que viene pasando en Tucumán en estos últimos 10 años: a algo que estaba abandonado y en desuso, hoy lo vemos en todo su esplendor. Tendrá tecnología de punta y personal altamente calificado”, celebró el ministro de Salud nacional, Juan Manzur.
El acto, que se hará durante la mañana, será encabezado por Manzur, por el gobernador José Alperovich y por las autoridades nacionales del PAMI.
El ministro de Salud provincial, Pablo Yedlin, detalló ayer que el centro sanitario se pondrá en funcionamiento por etapas. La primera incluye la apertura del centro quirúrgico que permitirá “descongestionar” las listas de espera de los quirófanos de los hospitales centrales.
“El jueves, los pacientes estarán haciéndose los (análisis) prequirúrgicos y el lunes se concretarán las primeras cirugías ambulatorias”, adelantó Yedlin. De acuerdo con las previsiones del Ministerio, en los cinco quirófanos podrían realizarse 50 cirugías por día y hasta 1.000 por mes (oftalmológicas, otorrinolaringológicas, urológicas, vasculares periféricas, ginecológicas, traumatológicas y plásticas y reparadoras). Los pacientes que sean operados se retiraran a su hogar en el día; es decir, no serán internados.
El Hospital Néstor Kirchner no tendrá los llamados consultorios de “demanda espontánea”. Los enfermos llegarán derivados desde otras instituciones del Siprosa, según detallaron las autoridades.
En las futuras tres etapas de apertura -la próxima sería en octubre- quedarían habilitados el servicio de odontología de alta complejidad; el laboratorio central de Salud Pública y el servicio de Hemato-oncología para adultos, de acuerdo con lo que enumeró Yedlin.
Según datos oficiales, se invirtieron unos $ 67 millones en la refuncionalización ($ 36 millones en la obra civil, $ 2 millones en el inmueble y $ 29 millones en el equipamiento completo). Se estima que el gasto mensual será de $ 10 millones, entre personal e insumos.
En tanto, el plantel que trabajará en esta instancia está conformado por 120 empleados. Se espera que, en total, se emplee a 350. La dirección está a cargo del médico Samuel Semrik.
El sanatorio ADOS, en Mendoza segunda cuadra, fue un hito en el sistema sanitario local. Había sido el edificio principal de la Asociación de Obras Sociales -de ahí sus siglas-, desde 1972. Había nacido por iniciativa de una veintena de sindicatos; fue intervenido durante la dictadura en los 70’; vivió su esplendor y fue carcomido por la inflación en los 80 y quebró. Fue reabierto, sin éxito, en los 90.
Tras ese derrotero, el edificio permaneció cerrado hasta que, en 2006, el Estado lo compró. En 2009, la Provincia firmó un acuerdo con el PAMI: la obra social financiaría las obras a cambio de prestaciones para sus afiliados durante 10 años (en instituciones del Siprosa). En ese entonces, Alperovich anunció que el plazo de los trabajos era de 18 meses y que sería inaugurado a fines de 2010. Lo mismo fue prometido cada año desde entonces.
Lo más popular
