Tendencias de este otoño invierno

Son las aliadas indiscutidas de las bajas temperaturas. Presentes en los guardarropas desde siempre, esta temporada no sólo se usan para protegernos del frío, sino que son el ítem que aporta estilo a los conjuntos más abrigados.  La idea es animarse a jugar y crear contraste con el resto del look. Los colores vibrantes son una elección acertada a la hora de aportarle luz y vida a los outfits más invernales. Los materiales y las texturas de las maxibufandas son múltiples debido a la amplia gama de géneros -lana, algodón o polar- y estampados que nos plantea la moda de esta estación, que van desde las más clásicas en un solo tono, hasta las escocesas y las animal print, entre muchas otras. A la hora de elegir, es importante tener en cuenta el largo del cuello, ya que las más anchas, de tejido grueso, favorecen a las personas de cuello largo, mientras que las más compactas son para los cuellos más cortos. Una segunda opción para estos últimos es inclinarse por las bufandas de algodón en vez de las tejidas. 

Hace ya unos años que la textura engomada viene adquiriendo notoriedad. Si esta temporada no llegó a la cima, entonces está demasiado cerca de ella. En sus comienzos, surgió como imitación del cuero, sobre todo para abaratar costos,  pero hoy es una tendencia IT con beneficios propios como su enorme versatilidad y también por ser adaptable tanto a las distintas fisonomías como a los diferentes estilos. En prendas como pantalones, es tan funcional como la calza, solo que su textura le da sofisticación. El corte más elegido es el chupín de tiro alto. Los detalles en rodillas, bolsillos o recortes de los pantalones también suman en los looks y permiten contrastar partes brillosas con otras opacas. Un punto indispensable a tener en cuenta con respecto a eso último, es el cuidar que no aporte demasiado volumen al cuerpo. Al ser tan entalladas y acentuar las piernas,  una buena manera de llevarlas es con prendas holgadas en la parte de arriba como camisas amplias y maxi sweaters  o incluso, con las dos cosas superpuestas. Otro tip interesante es el de equilibrar el look sin saturarlo con varias prendas engomadas. Es decir, si se lleva un pantalón de este tipo,  es importante que no se superponga con una chaqueta, blazer o campera del mismo estilo. Al contrario, el punto es generar contraste de texturas que de armonía visual y más aún, si es para un conjunto para el día. 

Es tal vez una de las propuestas más jugadas que desembarcaron en las pasarelas de los grandes diseñadores europeos en un primer momento, y rápidamente se extendió al resto del mundo. Cocó Yanel las presentó en su último desfile Las zapatillas existieron siempre y  seguramente lo seguirán haciendo. Nos acostumbramos a llevarlas al gimnasio, a la calle, para cualquier tipo de ejercicio al aire libre o para looks relajados y deportivos de toda hora. Pero este año el planteo es otro. El desafío en este invierno es  complementarlas hasta con los estilismos más sofisticados y elegantes e incorporarlas a todos nuestros outfits, quebrando cualquier estereotipo existente. Si bien el MUST son las más deportivas, para suerte de muchas,  vienen para todos los gustos: con o sin taco- o plataforma-, lisas, estampadas, metalizadas, con apliques -como tachas- de cuero o charol, y más. Lo importante es elegir las más sentadoras para cada personalidad y sentirse cómodas y a gusto con ellas. Lo ideal para cumplir con la consigna es llevarlas con prendas como camisas y blazers, con polleras, y hasta con vestidos de cóctel y prendas de seda, cuero y pieles sintéticas. Esto logrará el contraste buscado entre lo casual o sport de las zapatillas con la sofisticación del resto de las prendas.  Cuanto mayor sea el contraste, mejor será el poder del look.