Consideran “intolerable” la tarea de Albaca

Carlos Ramón Albaca, fiscal de Instrucción de la II Nominación de esta capital, no logró imponer su versión de que Paulina Lebbos pudo fallecer por causas naturales y de que hizo todo lo que estuvo a su alcance para esclarecer la muerte pese a los defectos que tenía la pesquisa de Alejandro Noguera. Al menos no le creyó Marta Ignacia Jerez, fiscala de Cámara e instructora del sumario administrativo que abrió la Corte Suprema de Justicia de Tucumán (CSJT) en julio de 2013.

Después de leer el expediente (33 cuerpos y 34 actuaciones complementarias), de informar las irregularidades constatadas, de formular los cargos, y de recibir el descargo y las pruebas de Albaca, Jerez manifestó: “ha quedado demostrado que el fiscal incurrió en conductas que evidencian el incumplimiento de los deberes que tenía a su cargo, lo que importa el mal desempeño de sus funciones y la producción de un menoscabo intolerable en la administración de justicia”.

En el período de Albaca la pesquisa careció de dirección y control, según Jerez. La fiscala expresó: “ante la gravedad de los sucesos, (Albaca) asumió un rol pasivo en la investigación ya que jamás cotejó y estudió los elementos aportados por la Policía y, menos aún, tomó medidas al respecto”. La instructora dijo que el fiscal procedió con negligencia e indolencia, y que actuó con ligereza. Y añadió: “Albaca no fue diligente tratando de descubrir la verdad con la mayor brevedad posible sino que dejó que los avatares del proceso amortigüen el dolor y el clamor público, y que el paso del tiempo entretenga la investigación con el consiguiente peligro de que las pruebas conseguidas de estropeen o pierdan”.

Descabellado

En el informe final que elevó a la CSJT el 31 de marzo pasado, Jerez ratificó y aumentó los reproches que había expresado en diciembre. A los pocos días, Albaca presentó la renuncia condicionada al otorgamiento de la jubilación -con el beneficio del 82% móvil-, dimisión que el gobernador José Alperovich aceptó en enero. La presentación de la renuncia dio pie a la comisión de Juicio Político de la Legislatura para archivar al menos dos pedidos para remover al fiscal Albaca, que continúa en su cargo porque aún no puede jubilarse (según fuentes judiciales, el dimitente no reuniría los aportes requeridos para pasar al sector pasivo).

El sumario administrativo fue iniciado como consecuencia de las irregularidades que denunció Diego López Ávila, fiscal de la IV Nominación de esta capital, cuando sustituyó a Albaca en la investigación de “Lebbos”. El titular de la Fiscalía II controló la pesquisa a partir de abril de 2006, luego de que Luis De Mitri, ministro público fiscal, separase a Noguera del caso en virtud del escándalo que generó una reunión privada entre ese ex fiscal de Instrucción (luego ascendido a fiscal de la Cámara de Apelaciones) y el gobernador.

En la serie de recriminaciones para con el desempeño de Albaca en “Lebbos”, Jerez negó que este haya intentado comprobar la existencia de un hecho delictuoso y expresó que su conducta suponía una “nula administración de justicia”. Además, deslizó que la falta de progreso investigativo habría sido deliberada: “cuando determinados hechos suceden invariablemente, nadie puede escudarse en una supuesta equivocación. En los errores no se persevera, pero en la intencionalidad, sí”.

La fiscala también criticó las hipótesis de Albaca relativas a que Lebbos podría haber muerto por un ataque de asma combinado con el consumo de alcohol y, eventualmente, de sustancias tóxicas; la práctica de la autoasfixia durante la masturbación y la práctica de la asfixia con una pareja. “Considero que (estas posibilidades) son descabelladas, absurdas, infundadas y ofensivas de la honra de quien no puede rebatirlas (la víctima). En ningún caso explica cómo, cuándo, en qué o con quién llegó el cuerpo de Paulina al lugar donde fue encontrado (Tapia), y tampoco consta ninguna medida ordenada o ejecutada por el fiscal (en ese sentido)”, analizó.

Con este acto, Jerez clausuró el sumario (la instructora rechazó que haya violado el secreto de sumario, como dijo Albaca para apartarla, pero omitió tratar la gran responsabilidad que este atribuyó al ministro De Mitri). A continuación, la Corte ha de definir qué hará con el fiscal, que en principio no puede ser removido ni jubilarse.

Repercusiones

Repudio.- El Comité de América Latina y el Caribe para la Defensa de los Derechos de la Mujer (Cladem) repudió “enérgicamente los dichos del fiscal Carlos Albaca referidos a la víctima Paulina Lebbos”. “Con sus dichos revela, además de un desconocimiento profundo del derecho, una posición misógina y sexista inadmisible en un funcionario judicial. Manifestaciones de esta naturaleza pueden acarrear para el Estado argentino responsabilidad internacional”, dijo Celia Debono.

Obstruir.- “Albaca actuó con el deliberado propósito de obstruir el esclarecimiento del asesinato. Protegido por la híbrida situación de apartado de la causa y renunciante en ejercicio, se refiere a la cuestión como si pudiere intervenir”, dijo el legislador José Páez (DC). Y pidió a la Corte que actúe.

"Delirio encubridor".- “El Partido Obrero (PO) repudia las declaraciones del fiscal Carlos Albaca quien, en una suerte de delirio encubridor, realiza una caracterización ensuciando a Paulina Lebbos y sus familiares para intentar demostrar que no hubo homicidio, donde tuvo lugar un crimen horrendo que involucra al poder político”, señalaron los dirigentes Daniel Blanco, Martín Correa y Alejandra del Castillo.

Corrupción.- “Esta nueva provocación de la corrupción y la impunidad lastima la sensibilidad humana y social de todos los tucumanos. Este artero ataque del fiscal Carlos Albaca a Paulina Lebbos merece nuestro repudio más enérgico, por ser parte de una escalada intimidatoria”, dijo Salvador Agliano, de la CTA Tucumán.