Un tiroteo quebró el acuerdo de paz entre Ucrania y Rusia

KIEV, Ucrania.- Rusia y los separatistas prorrusos del este de Ucrania rompieron ayer la tregua de Pascua declarada por el gobierno de Kiev. Un violento tiroteo nocturno, ocurrido en un puesto de control en la ciudad tomada de Slaviansk, provocó varios muertos, y evidenció la debilidad del acuerdo de paz que habían firmado en Ginebra.

Durante la madrugada, un convoy de vehículos se aproximó a un punto de control manejado por las milicias separatistas en las afueras de Slaviansk, una de las ciudades de la provincia de Donestk, el epicentro del levantamiento prorrusos. El arribo de los vehículo desató el tiroteo.

Los insurgentes denunciaron que el enfrentamiento dejó cinco muertos, mientras que el Ministerio del Interior ucraniano afirmó que sólo falleció una persona. En tanto, la prensa internacional presente en el lugar del conflicto informó que las víctimas fatales fueron dos, según la agencia de noticias EFE.

El autoproclamado “alcalde popular” de Slaviansk, Viacheslav Ponomariov, acusó del ataque a la organización ultranacionalista Sector de Derechas, una milicia que ofició como grupo de choque durante los meses de protestas en Kiev que terminaron con la destitución del presidente prorruso Viktor Yanukovich en febrero pasado y la asunción del actual gobierno ucraniano prooccidental. “La resistencia (los separatistas) anunció una tregua durante las fiestas de Pascua. Ahora, la tregua se rompió, Consideramos esta acción como una provocación”, aseguró el líder prorruso, según la agencia rusa RIA-Novosti.

Ponomariov también denunció que la ciudad de Slaviansk “está sitiada por el Sector de Derechas” y pidió al presidente ruso, Vladimir Putin, que envíe fuerzas de paz a la región ucraniana para protegerlos. Actualmente, la vecina potencia mantiene desplegados alrededor de 40.000 soldados cerca de la frontera con Ucrania.

Desde que las protestas prooccidentales triunfaron en Kiev, y desde que asumieron el poder, los grupos separatistas comenzaron a levantarse en algunas ciudades del este de Ucrania, cerca de la frontera con Rusia, en contra de las nuevas autoridades, a las que acusan de proteger a sectores ultranacionalistas y antirrusos.

“Noche sagrada”

El grupo extremista ucraniano Sector de Derechas no sólo rechazó cualquier vinculación con el tiroteo de esta madrugada, sino que calificó las acusaciones como una “provocación blasfema de Rusia”. “Es blasfema porque pasó en una noche sagrada para los cristianos, en la noche de Pascua. El ataque fue claramente lanzado por las fuerzas especiales rusas”, contraatacó el vocero del grupo nacionalista ucraniano, Artem Skoropadsky.

Desde Moscú, el gobierno de Putin volvió a expresar ayer su apoyo a los separatistas, y coincidió en que la tregua declarada por el gobierno interino de Kiev quedó rota con el tiroteo ocurrido en Slaviansk. “Rusia está indignada por la provocación de los combatientes, lo que demuestra la falta de voluntad de las autoridades de Kiev de controlar y de desarmar a los nacionalistas y extremistas”, sentenció la Cancillería rusa en un comunicado oficial.

Esta semana, Estados Unidos, la Unión Europea, Rusia y el gobierno interino prooccidental de Ucrania firmaron un acuerdo en Ginebra. El texto llamó a desarmar a los “grupos ilegales” que operan en esa ex república soviética y desalojar los edificios públicos tomados por separatistas prorrusos en el este del país, a cambio de que Kiev acepte reformar la constitución.

Los separatistas ucranianos pro rusos rechazaron el acuerdo y pidieron sus propias condiciones, entre ellas el desarme de los grupos extremistas cercanos al nuevo gobierno interino en Kiev y la recientemente creada Guardia Nacional, y la renuncia del gobierno, al que consideran ilegítimo. (Télam)