Los científicos sientan en el banquillo a los vidrios polarizados

Los científicos sientan en el banquillo a los vidrios polarizados

Investigadores del Conicet y de la UNT determinaron que las láminas más oscuras pueden afectar la visión del conductor.

PROCESO. Un técnico coloca un film oscuro en una ventanilla. PROCESO. Un técnico coloca un film oscuro en una ventanilla.
27 Noviembre 2013
Te compraste el auto que tanto anhelaste. Te derretís al observar sus líneas aerodinámicas, te enloquecés con las llantas deportivas, te extasiás con el sonido de su motor. Pero sentís que falta algo para que se convierta en el auto soñado: un buen polarizado. Otra situación: cargás a tu familia en un vehículo y salís a la calle, pero no estás tranquilo. Sentís que en cada esquina, en cada semáforo hay un delincuente acechando. Entonces, oscurecés los vidrios para sentirte protegido. Una más: el calor aprieta, te da la impresión de que el aire acondicionado no alcanza. Pensás que el polarizado quizás te ayude a conducir más fresco. Y lo instalás.

Ya sea por motivos estéticos, de seguridad o térmicos, entre otros, son cada vez más los autos que circulan con films oscurecedores sobre los vidrios. Esta conclusión llevó a científicos del Conicet y de la UNT a realizar investigaciones para intentar determinar si el polarizado afecta la visión y, por ende, si incrementa el riesgo de accidentes. También trataron de verificar si son válidas las razones por las cuales se oscurecen los vidrios, entre ellas, la del supuesto mejor desempeño del aire acondicionado. "La ley Nacional de Tránsito establece que, al salir de fábrica, los vidrios de seguridad de los vehículos deben tener entre un 70% y un 75% de transmitancia (es la cantidad de luz visible que ingresa al vehículo). Pero no dice nada acerca de la posibilidad de oscurecerlos", explicó Andrés Martín, científico del Conicet. "Nuestro objetivo es discutir cuál debería ser el criterio de oscurecimiento ya que no hay una norma que lo establezca", agregó. El trabajo fue presentado en el marco de un proyecto de divulgación mediante el cual el Conicet busca acercar las investigaciones a la sociedad.

Entre otros procedimientos, Martín y sus colegas del Departamento de Luminotecnia, Luz y Visión de la UNT y del Instituto de Investigación en Luz, Ambiente y Visión del Conicet recurrieron a la curva de sensibilidad al contraste que indica cómo debe comportarse un observador que ve bien en determinadas condiciones. De acuerdo con esto, si un film lleva al observador fuera del rango de normalidad de la curva no debería ser utilizado.

"Tomamos tres tipos de films que se colocan en Tucumán y comprobamos que el más oscuro (es el que permite apenas el paso de entre el 3% y el 6% de luz visible) debería estar prohibido, porque afecta la visión de las personas. Con las otras dos láminas no detectamos estas alteraciones. De todos modos, este es apenas un criterio", puntualizó Martín.

Cuando el calor aprieta...

Por otro lado, los científicos indagaron en la posibilidad de que el oscurecimiento de los vidrios ayude a disminuir el calor dentro del habitáculo del vehículo. "Hicimos una encuesta entre los instaladores y detectamos que una de las razones por las que los conductores oscurecen los vidrios es para tratar de mejorar el rendimiento de los aires acondicionados. Tras nuestro estudio determinamos que, efectivamente, el auto polarizado demora más en calentarse, pero a la larga y en las mismas condiciones, toma la misma temperatura que otro auto sin oscurecimiento", detalló el científico.

El médico Juan Massaguer, director de capacitaciones del Centro de Emergencias de la Provincia, también participó de la presentación del trabajo y fue concreto: "Si uno conduce de noche con los vidrios laterales del conductor polarizados se produce el mismo efecto que cuando una persona maneja bajo los efectos del alcohol: la visión en túnel, es decir, tiene dificultades para advertir la presencia de otros vehículos. Y la pérdida de percepción de la profundidad que causa el alcohol se ve agudizada si los vidrios del auto están oscurecidos".

El objetivo de los científicos del Conicet es que se debata y se desarrolle una normativa que regule el oscurecimiento de los vidrios de los vehículos. "La sociedad tiene que decidir qué es lo que quiere: que prime la intimidad de los que van adentro del vehículo, que se lo pueda reconocer al conductor desde afuera, que no se oscurezca nada. Una vez que esto se decida, los científicos haremos las mediciones que correspondan", concluyó Martín.

Comentarios