31 Agosto 2013
EN LA VEREDA. Los peritos de la Policía cubrieron el cuerpo de César Bellido y acordonaron la zona para recolectar las pruebas del caso. LA GACETA / FOTO DE DIEGO ARAOZ
"Quedate quieto hijo de p...", le dijo César Antonio Bellido al chofer de una camioneta en la que distribuían lácteos, según el trabajador. Fueron las últimas palabras del joven de 20 años, quien murió tras tirotearse con el conductor, según la Policía.
El presunto intento de asalto ocurrió ayer a las 14 en el barrio 1° de Mayo, en Lules. Allí las calles no tienen nombre, y los vecinos comentaron que la cuadra en la que se produjo el enfrentamiento queda ubicada entre las manzanas E y F.
Fuentes policiales comentaron que el empleado de la distribuidora que viajaba como acompañante estaba adentro de un negocio cuando llegaron dos hombres en una moto. En la camioneta sólo quedaba el chofer, quien al ver a Bellido acercarse con un arma en la mano, sacó su pistola bersa 9 mm, y comenzó el tiroteo.
Los peritos de la Policía Científica detectaron al menos 10 disparos que se cruzaron Bellido y el chofer. El asaltante, según el relato que los testigos brindaron a los investigadores, fue herido en el abdomen y trató de huir. Recorrió unos 50 metros y cayó en la puerta de la casa 14 de la manzana F. Allí agonizó durante unos minutos, y falleció. Su cómplice, por su parte, escapó.
Cuando llegaron los policías de la comisaría de Lules, a cargo del comisario Walter Ledesma y del oficial Marcelo Aparicio, el chofer entregó el arma y les relató lo que había pasado. La víctima del intento de asalto tenía una herida de bala en la mano derecha, en tanto que otro proyectil le había rozado el cuello, dijo una fuente de la Policía.
El chofer fue trasladado al Centro de Salud y luego a un sanatorio céntrico. La fiscala de Instrucción de la VIII° Nominación, Adriana Gianonni, decidió que no quedara detenido.
Toda la cuadra fue acordonada para que pudieran pasar los peritos. En cada una de las esquinas se amontonaron los vecinos para ver la tarea de la Policía Científica.
Rápida noticia
El supuesto cómplice de Bellido fue aprehendido en una situación inusual: estaba parado a una cuadra del lugar, observando la escena. Los policías lo reconocieron por la chapa patente de la Honda CG, y cuando se identificó descubrieron que su nombre coincidía con el que figuraba en el carnet de manejo que tenía el fallecido.
Un familiar de Bellido comentó que el joven había salido esta mañana y le había dicho a su madre que se iba a trabajar. "Ahora nos enteramos que andaba macaneando por acá, cuando nosotros vivimos en capital", comentó, acongojado, el pariente.
El presunto intento de asalto ocurrió ayer a las 14 en el barrio 1° de Mayo, en Lules. Allí las calles no tienen nombre, y los vecinos comentaron que la cuadra en la que se produjo el enfrentamiento queda ubicada entre las manzanas E y F.
Fuentes policiales comentaron que el empleado de la distribuidora que viajaba como acompañante estaba adentro de un negocio cuando llegaron dos hombres en una moto. En la camioneta sólo quedaba el chofer, quien al ver a Bellido acercarse con un arma en la mano, sacó su pistola bersa 9 mm, y comenzó el tiroteo.
Los peritos de la Policía Científica detectaron al menos 10 disparos que se cruzaron Bellido y el chofer. El asaltante, según el relato que los testigos brindaron a los investigadores, fue herido en el abdomen y trató de huir. Recorrió unos 50 metros y cayó en la puerta de la casa 14 de la manzana F. Allí agonizó durante unos minutos, y falleció. Su cómplice, por su parte, escapó.
Cuando llegaron los policías de la comisaría de Lules, a cargo del comisario Walter Ledesma y del oficial Marcelo Aparicio, el chofer entregó el arma y les relató lo que había pasado. La víctima del intento de asalto tenía una herida de bala en la mano derecha, en tanto que otro proyectil le había rozado el cuello, dijo una fuente de la Policía.
El chofer fue trasladado al Centro de Salud y luego a un sanatorio céntrico. La fiscala de Instrucción de la VIII° Nominación, Adriana Gianonni, decidió que no quedara detenido.
Toda la cuadra fue acordonada para que pudieran pasar los peritos. En cada una de las esquinas se amontonaron los vecinos para ver la tarea de la Policía Científica.
Rápida noticia
El supuesto cómplice de Bellido fue aprehendido en una situación inusual: estaba parado a una cuadra del lugar, observando la escena. Los policías lo reconocieron por la chapa patente de la Honda CG, y cuando se identificó descubrieron que su nombre coincidía con el que figuraba en el carnet de manejo que tenía el fallecido.
Un familiar de Bellido comentó que el joven había salido esta mañana y le había dicho a su madre que se iba a trabajar. "Ahora nos enteramos que andaba macaneando por acá, cuando nosotros vivimos en capital", comentó, acongojado, el pariente.
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