Windows 8: Claves para no morir en el intento

Windows 8: Claves para no morir en el intento

El último sistema operativo de Windows viene ya en la mayoría de las PC nuevas. El cambio es drástico, pero no imposible. Consejos para dar el salto.

Windows 8: Claves para no morir en el intento
21 Julio 2013

Cambia, todo cambia. Y las computadoras nuevas, en cualquiera de sus versiones (de escritorio o móviles) ya le están diciendo adiós al viejo Windows 7 y su enorme mayoría viene de fábrica con Windows 8. Por ahora, la última versión del sistema operativo más usado en el mundo convive con su antecesora, aunque esta ya está en vías de extinción. No precisamente porque Microsoft esté dejando de dar actualizaciones ni parches, sino porque la mayoría de las PC que se compran en las casas de consumo masivo ya vienen con la nueva versión.

Para quienes hayan tenido una experiencia previa en el uso de una tablet, el salto de Windows 7 a 8 no resultará demasiado complicado. De hecho, este sistema operativo fue concebido desde el principio para llevar el "concepto" táctil de las tabletas a las computadoras de escritorio. Pero es esta una historia de ida y vuelta: algunos fabricantes como Samsung, Lenovo, Asus y Acer, entre otros, programaron algunas de sus tablets con Windows, lo que implica una nueva división de aguas que se suma a los sistemas operativos Android (de Google) e iOS (Apple).

Sin embargo, para los que están acostumbrados al viejo entorno gráfico del sistema operativo de las ventanitas, la nueva versión puede resultarles incomprensible. Al menos en principio. Y es que se trata de un cambio radical, comparable quizás con el salto que se produjo desde Windows 3.11 a Windows 95. Para ellos serán particularmente útiles estos consejos, orientados a pasarse al nuevo sistema operativo y no morir en el intento.

#1. Dos mundos paralelos. Antes que nada, es necesario entender que en Windows 8 conviven el nuevo entorno llamado "Metro" (el que se asemeja a una tablet), con el viejo escritorio de las versiones anteriores. No sabemos si esta convivencia será para siempre, pero en la actualidad existen algunas aplicaciones "Metro" (para la nueva interfaz) y otras para el viejo y conocido "desktop".

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#2. Animarse a experimentar y a personalizar. Como siempre en informática, los buenos frutos comienzan por perder el miedo. Intentá aprovechar todo lo que el entorno nuevo tiene para darte, sin pensar tanto en "traducirlo" al anterior. La nueva pantalla de Inicio, la que aparece cuando se enciende la PC, es ampliamente personalizable, por lo que lo ideal es adaptarla a tus necesidades. Por eso, y mucho más que en las versiones anteriores, es útil crear cuentas individuales para cada usuario.

#3. Las esquinas son tus aliadas. Todo lo que extrañás de Windows 7 está escondido en las cuatro esquinas. En la foto que ilustra esta nota vas a encontrar qué hay en cada una de ellas. Además, aprovechá los atajos de teclado: te van a simplificar la experiencia.

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1 - Aplicaciones

Haciendo un clic en la esquina superior derecha se vuelve a la ventana que tenías abierta previamente. Deslizando el cursor hacia abajo (sin hacer clic), se puede abrir o cerrar (con clic izquierdo o derecho, respectivamente) las aplicaciones Metro abiertas. Si tenías activado el viejo Escritorio, también aparece en este listado.2

2 - Escritorio/inicio

Con un clic, alterna entre la nueva pantalla de Inicio y el viejo Escritorio de las versiones anteriores de Windows. De esta manera, si tenemos abierto un programa en el Escritorio, la acción alternará entre ese programa y la nueva pantalla de Inicio.

3 - Opciones

En esta esquina hay una lista de opciones: Búsqueda (tras un clic tendrás que elegir en dónde buscar), Compartir, Inicio (vuelve a la pantalla principal), Dispositivos y Configuración (un equivalente al Panel de Control). Dentro de Configuración se puede controlar el volumen y apagar la PC.

4 - Menú contextual

En el área central de los márgenes superior e inferior, con un clic derecho aparece un menú contextual de la aplicación de Windows 8 que se está visualizando. Esto es particularmente útil ya que las nuevas apps del sistema operativo ocupan toda la pantalla y no muestran ya los botones de minimizar, mover ni cerrar. Estas sólo aparecen en los programas del modo Escritorio.3


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