02 Abril 2013
UNA VEZ MAS. La violencia volvió a decir presente en las canchas de fútbol. LA GACETA / FOTO DE OSVALDO RIPOLL
La paciencia de Nicolás Nanterne Giacchino se agotó a los 22 minutos del segundo tiempo. Cansado por la actitud de los hinchas de Jorge Newbery, que arrojaron bombas de estruendo en reiteradas ocasiones, y al ver que los jugadores visitantes fueron afectados por las explosiones suspendió el partido de ida del Torneo del Interior que el local y el "villero" igualaban 0 a 0.
El caso será analizado por el tribunal de disciplina del Consejo Federal pero si se tienen en cuenta antecedentes similares recientes, la situación de los "aviadores" es complicada y la sanción podría ser durísima.
Marcelo Lazarte -fue afectada su visión- y Sergio Torres -tuvo problemas auditivos en el oído izquierdo y sufrió vomitos-, fueron trasladados al hospital de Aguilares para su atención.
En el primer tiempo el partido estuvo detenido cinco minutos por las bombas de estruendo y pese a la advertencia de Nanterne Giacchino, los hinchas locales volvieron a arrojarlas en el segundo tiempo. Allí, el árbitro decidió suspender las acciones.
Hasta ese momento, Jorge Newbery fue claramente superior a Amalia pero la falta de precisión en la definición le impidió marcar diferencias en el marcador. LA GACETA
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