Iban a dar a luz en los 70; siguen desaparecidas

Iban a dar a luz en los 70; siguen desaparecidas

La megacausa revisa casos de embarazadas que fueron secuestradas. Cinco de las víctimas aparecen en la causa "Arsenales II-Jefatura II". Sin embargo, según la agrupación Hijos, la cifra de capturadas asciende a 15 en la provincia. Testimonios

LOS ROSTROS DE LA AUSENCIA. Estas son las mujeres cuya desaparición y las de sus bebés figuran en la Justicia. GENTILEZA AGRUPACION HIJOS LOS ROSTROS DE LA AUSENCIA. Estas son las mujeres cuya desaparición y las de sus bebés figuran en la Justicia. GENTILEZA AGRUPACION HIJOS
24 Marzo 2013

"Me robaron un hermano. Me gustaría que los imputados declararan adónde fueron a parar él y los restos de mi madre". El ruego de Fernando Araldi remeció hace algunas semanas la sala del Tribunal Oral Federal (TOF). El joven testificó porque su mamá Diana Oesterheld  y su papá Carlos Araldi figuran como víctimas en la megacausa "Arsenales II-Jefatura II". Diana estaba embarazada de entre siete y ocho meses cuando fue secuestrada. Tanto ella como su bebé permanecen desaparecidos.
De esta manera, el juicio puso en la escena el drama de las  mujeres que esperaban un hijo cuando fueron arrancadas de sus vidas y encerradas en Centros Clandestinos de Detención (CCD) durante el terrorismo de Estado de la década del '70. Ocurre que en el histórico proceso oral hay otras cuatro embarazadas que corrieron el mismo desafortunado destino. Se trata de Alcira Santos Ochoa (siete meses), Azucena Bermejo (cuatro meses), María Isabel Jiménez (dos meses) y Estela López (tres meses). 
Sin embargo, el lamentable número asciende a 15 si se toman todos los casos denunciados en Tucumán. Entre 1975 y 1979 fueron detenidas y desaparecidas también: Olga Cristina González (cuatro a seis meses), Amalia Moavro (tres meses y medio), Rosa López (cinco meses), Nilda Zelarayán (seis meses), Nora Abdala (ocho meses), Alicia Pérez (tres meses), Lucrecia Lescano (cuatro a cinco meses), Alicia Cerrota (dos meses), Mónica García (dos meses) y María Angélica Cisterna (seis meses). 
Si bien aún no pudo demostrarse en un juicio que en el circuito represivo local haya habido un sistema organizado específicamente para el nacimiento y posterior robo de los niños, en lo que va del juicio se escucharon decenas de testimonios que  daban cuenta de que habría habido nacimientos en los CCD. Mujeres a punto de dar a luz, llantos de bebés y gritos de mujeres pidiendo por sus chicos. Esas son algunas de las imágenes que graficaron quienes pasaron frente al estrado.
Por ello, sobrevuela el fantasma de la apropiación ilegal.
La estimación de casos pertenece a la base de datos de  la agrupación Hijos (Hijos e Hijas por la Identidad y la Justicia contra el Olvido y el Silencio). La rama local de la organización de derechos humanos -cumple 17 años en abril- es uno de los nodos que en Tucumán reciben y acompañan a quienes sospechan que pueden ser hijos de desaparecidos.

"La verdad libera"  
"¿Sabés quién sos?". Natalia Ariñez lanza la pregunta e inquiere con los ojos llorosos. "Ellos son desaparecidos, porque desapareció su identidad. No dejamos de buscarlos, de esperarlos", añade. La posibilidad de que por allí anden caminando al menos 15 personas que no sepan su verdadera identidad la angustia. Y esa preocupación motoriza el trabajo de ella y de los otros miembros de la comisión Hermanos, dentro de la organización. "Este trabajo es de hormiga. No sólo buscamos a los chicos que pueden haber nacido en cautiverio. Es importante que los que nunca se animaron a denunciar también se acerquen", insta. Relata que atendieron muchas presentaciones espontáneas pero que hasta el momento ninguno de los casos dio positivo en la prueba de ADN.  
Tener entre 38 y 34 años, no encontrar fotos de su mamá embarazada o "sentirse fuera de lugar" en su familia. Los indicios que siembran dudas son innumerables según explica Ariñez. Pero uno de los enemigos a los que se enfrentan es el miedo. "Es muy recurrente. Sobre todo, por lo que puede pasar con los apropiadores. El 80% de los que entrevistamos, se acerca cuando sus padres fallecieron", ejemplifica. Detalla que cada caso es diferente, porque hay adopciones clandestinas pero también otras que se hicieron de buena fe.
"No se puede construir la identidad con mentiras. La verdad libera", concluyó.
Como en Tucumán no hay una filial de Abuelas de Plaza de Mayo, Hijos se encarga de los trámites. Por contactos, enviar mail a [email protected]. Las entrevistas son confidenciales.
La otra persona autorizada a recibir denuncias es Alejandra García Aráoz, (APDH Tucumán), mediante el correo electrónico [email protected]

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