La fiesta tafinista se extendió hasta la madrugada

El comienzo del fin arrancó con la voz más conocida del valle: la de "Truquía" Gutiérrez, el animador eterno de desfiles y jineteadas en Tafí y alrededores. Desvelados tras una noche larga de baile, folclore y juegos de carnaval, lugareños y turistas disfrutaron del desfile de carrozas y de la doma que empezaban a cerrar una nueva edición de la Fiesta del Queso, que este año sopló con visible éxito las 44 velitas.
A pesar de la lluvia, que cayó persistentemente desde las 5 a las 19, el festival se desarrolló casi como estaba previsto. Terminó "temprano", cerca de las 4 de la madrugada. Tras la actuación de Los Tekis y del Chaqueño Palavecino, la gente empezó lentamente a retirarse. 
La actividad comenzó al mediodía. Diez carrozas desfilaron desde el centro de la villa hacia el complejo Democracia, donde se lleva a cabo el tradicional encuentro. Allí volvieron a desfilar, evocando momentos y costumbres de la vida tafinista. "Fueron menos carrozas que el año pasado, pero hubo varias de muy buen nivel", evaluó Javier Astorga, jefe de Prensa del municipio. De las 10, la que se llevó el premio mayor -anunciado a la medianoche- fue la carroza del Club Atlético San Miguel, de Las Tacanas. Ellos decidieron representar la verdadera mudanza que protagonizaban los tafinistos en la época de zafra, cuando cargaban los bienes imprescindibles para pasar el invierno en el surco: desde chanchos para comer hasta bicicletas para transportarse.

Después del desfile se abrió la puerta a uno de los momentos más esperados de la Fiesta del Queso año tras año: la doma. Sin embargo, las actividades de corral no duraron mucho: a pesar de la insistencia, el entusiasmo y el valor de los jinetes, las autoridades se vieron obligadas a tomar la peor decisión y alrededor de las 17.30 suspendieron la jineteada porque el terreno se había vuelto tremendamente peligroso tras una tormenta que obligó a toda la villa a refugiarse bajo techo. No quedaba más opción que retirarse a descansar para volver a agitar los ponchos a la noche con Los Tekis, Los Surcos, Las Voces del Boquerón, Los Huayra, Diego Villafañe y el cierre más festivo con El Chaqueño Palavecino, siempre aclamado en los escenarios folclóricos de todo el país.

Los organizadores estuvieron con el pronóstico en las manos hasta el último instante. A las 22 comenzó el espectáculo con un cielo parcialmente nublado, y la lluvia -a diferencia de lo que sucedió en la capital- no amenazaba con arruinar la fiesta. Después de un bloque de música con artistas locales, llegó uno de los momentos más esperados del festival: la elección de la Donosa.

Fueron nueve postulantes para la corona de la reina de la Fiesta del Queso. Quien se quedó con el cetro fue María de las Mercedes Pistán, de 15 años, la representante del Club Santa Rosa, del barrio tafinisto que lleva el mismo nombre.

Los fuegos artificiales iluminaron la emoción de la Donosa 2013, que conquistó un cerrado aplauso por parte de un público estimado en 15.000 personas. La jornada que más espectadores convocó el festival, sin embargo, fue el sábado -20.000 según las cifras de la Municipalidad-, noche que tuvo como estrella principal a Jorge Rojas.

La elección de la joven más linda del año marcó un corte para comenzar con lo más jugoso de la noche. Después de unos tragos para lubricar la garganta, los visitantes disfrutaron de los artistas nacionales hasta bien entrada la madrugada.