14 Febrero 2013
La fiscala Gianonni pidió la detención del jefe de la Comisaría 8ª y de tres oficiales
Un joven, de 18 años, fue detenido en la vía pública y trasladado a la Seccional, donde lo golpearon "salvajemente", según la denuncia. La víctima terminó en el Padilla. La abogada defensora de un cabo dijo que existe una persecución contra la Policía
DIÁLOGO EN EL PATIO. La abogada Geraldine Salazar ejerció la defensa de unos de los policías involucrados. LA GACETA / FOTOS DE OSVALDO RIPOLL
No se salvó ni el jefe de la comisaría. Cuatro policías de la seccional 8ª quedaron aprehendidos anoche, luego de declarar durante varias horas ante la fiscala de la VIII° Nominación Adriana Giannoni. Los delitos que se les imputa son apremios ilegales y privación ilegítima de la libertad.
La víctima -según informaron a LA GACETA fuentes judiciales- es un joven de 18 años, cuya identidad se resguarda por ser menor de edad. El caso data del 10 de enero, cuando el muchacho fue interceptado en la vía pública por los uniformados. Luego lo trasladaron a la comisaría, ubicada en avenida Poviña y Alsina, donde lo golpearon de manera salvaje, según la denuncia.
Las fuentes mencionaron que el joven permaneció varias horas privado de su libertad y sometido a maltratos por parte de los policías, quienes se resistían a liberarlo. También informaron que el comisario, el subcomisario, el cabo y un oficial subayudante involucrados en el caso se comunicaron con los familiares de la víctima y le solicitaron dinero (hasta ayer se desconocía la suma exacta) para que el joven pudiera regresar a su casa sin que "le armen una causa".
En el Padilla
Los cuatro policías se presentaron a declarar en tribunales, ayer a la tarde. Las fuentes señalaron que la investigación demandó bastante tiempo, ya que la víctima no había podido identificar a los uniformados que lo agredieron. Por esa razón, la citación a los policías demoró más de un mes. Después de escuchar el testimonio de los imputados, la fiscala Giannoni ordenó que permanezcan aprehendidos. Además, solicitó la detención para los cuatro uniformados. Anoche, al cierre de esta edición, aguardaban que el juez de Instrucción Alejandro Javier Tomas firmara esa orden.
Los involucrados en el caso son el jefe de la comisaría, comisario principal Daniel Aguilar; el subjefe de la mencionada dependencia, subcomisario Julio Monteros; el cabo Juan Silva y un oficial subayudante, cuya identidad no trascendió. La abogada defensora del cabo Silva, Geraldine Salazar, reclamó que la víctima hizo la denuncia 10 días después del hecho. Según la información que recibió la letrada, Giannoni tomó conocimiento del caso a través del destacamento policial del hospital Padilla, donde el muchacho estaba recibiendo asistencia médica. "La verdad de los hechos es que ese chico nunca estuvo detenido", aseguró la abogada Salazar. Además, en defensa de su cliente afirmó que "existe una persecución hacia la Policía".
La víctima -según informaron a LA GACETA fuentes judiciales- es un joven de 18 años, cuya identidad se resguarda por ser menor de edad. El caso data del 10 de enero, cuando el muchacho fue interceptado en la vía pública por los uniformados. Luego lo trasladaron a la comisaría, ubicada en avenida Poviña y Alsina, donde lo golpearon de manera salvaje, según la denuncia.
Las fuentes mencionaron que el joven permaneció varias horas privado de su libertad y sometido a maltratos por parte de los policías, quienes se resistían a liberarlo. También informaron que el comisario, el subcomisario, el cabo y un oficial subayudante involucrados en el caso se comunicaron con los familiares de la víctima y le solicitaron dinero (hasta ayer se desconocía la suma exacta) para que el joven pudiera regresar a su casa sin que "le armen una causa".
En el Padilla
Los cuatro policías se presentaron a declarar en tribunales, ayer a la tarde. Las fuentes señalaron que la investigación demandó bastante tiempo, ya que la víctima no había podido identificar a los uniformados que lo agredieron. Por esa razón, la citación a los policías demoró más de un mes. Después de escuchar el testimonio de los imputados, la fiscala Giannoni ordenó que permanezcan aprehendidos. Además, solicitó la detención para los cuatro uniformados. Anoche, al cierre de esta edición, aguardaban que el juez de Instrucción Alejandro Javier Tomas firmara esa orden.
Los involucrados en el caso son el jefe de la comisaría, comisario principal Daniel Aguilar; el subjefe de la mencionada dependencia, subcomisario Julio Monteros; el cabo Juan Silva y un oficial subayudante, cuya identidad no trascendió. La abogada defensora del cabo Silva, Geraldine Salazar, reclamó que la víctima hizo la denuncia 10 días después del hecho. Según la información que recibió la letrada, Giannoni tomó conocimiento del caso a través del destacamento policial del hospital Padilla, donde el muchacho estaba recibiendo asistencia médica. "La verdad de los hechos es que ese chico nunca estuvo detenido", aseguró la abogada Salazar. Además, en defensa de su cliente afirmó que "existe una persecución hacia la Policía".
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