En 1993, una gran tempestad arrasó con Famaillá y Monteros

En 1993, una gran tempestad arrasó con Famaillá y Monteros

Por las intensas lluvias, los ríos se desbordaron, hubo corte de rutas, casas devastadas y 2.000 personas tuvieron que ser evacuadas.

07 Enero 2013
El 25 de enero de 1993, la madre naturaleza se ensañó con las principales localidades del sur provincial. Ese día, una gran tempestad arrasó la provincia. Hubo 2.000 evacuados, caída de puentes, corte de rutas y casas devastadas. Los 150 milímetros de agua que cayeron en poco tiempo fue suficiente para castigar a Famaillá, Monteros, Medinas y Tafí Viejo. Ese año fue traumático para cientos de familias que el año anterior habían padecido el efecto de las inundaciones. En 1992, la naturaleza golpeó con todo su poderío. La crecida de los ríos y la apertura de las compuertas del dique de Escaba afectó La Madrid, Medinas y otros pueblos. Unos 10.000 vecinos quedaron despojados de sus bienes y fueron evacuadas 2.500 personas. Rutas nacionales y provinciales quedaron cortadas.

El 31 de diciembre de 1996 y el 1 de enero de 1997, una copiosa lluvia se desató sobre el sur de la provincia: cayeron entre 130 y 160 milímetros. Las poblaciones más afectadas fueron Río Colorado, Bella Vista, Manchalá, Concepción y Los Agudo. 600 personas fueron evacuadas. En la Capital llovió 80 milímetros.

El 6 y 7 de marzo de 2000, durante el gobierno de Julio Miranda, un total de 250 milímetros de agua cayó en dos días y causó graves daños en los departamentos de Alberdi, La Cocha, Río Chico, Simoca, Graneros y Leales. Hubo 1.400 evacuados y 5.000 damnificados por los anegamientos. Un hombre cayó a un arroyo y desapareció.

La última gran tormenta que provocó importantes daños se produjo entre el 11 y 12 de enero de 2007, a fines del primer mandato de José Alperovich. Un fuerte temporal afectó la capital y el interior, principalmente a Río Colorado, La Cocha, Chicligasta y Concepción. En La Cocha cayeron 80 milímetros. Ese año, el agua se cobró la vida de dos hombres que fueron arrastrados por la corriente y unas 5.000 personas debieron ser evacuadas.

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