No es posible curarla, pero sí se puede tratar

No es posible curarla, pero sí se puede tratar

21 Noviembre 2012
El doctor Oscar Iguzquiza(h) atiende varios pacientes de Esclerosis Múltiple (EM). Es, pues, una voz autorizada para explicar de qué se trata, cómo se vive con ella, qué necesitan los pacientes.

"Es una enfermedad autoinmune. No se sabe por qué, pero el sistema inmunitario ataca la mielina que recubre los nervios, y las neuronas del sistema nervioso central pierden en parte, o totalmente, su capacidad de transmisión", señala. Lo que sigue es una síntesis de su explicación:

- No hay cifras ciertas para nuestra provincia, pero en Buenos Aires se calcula que afecta a 12 de cada 100.000 personas, en particular, mujeres. En general se presenta cuando los pacientes tienen entre 20 y 40 años, por eso, aunque la incidencia es relativamente baja, es el mayor agente de discapacidad entre gente joven.

- Como no se conocen las causas no se puede prevenir y, hoy por hoy, no existe cura. Pero se puede tratar, y es muy importante el diagnóstico precoz. El problema es que los síntomas son muy inespecíficos pues dependen de dónde esté la lesión. Los más fáciles de reconocer son hormigueo, debilidad, falta de coordinación, alteraciones visuales, rigidez muscular, trastornos del habla y andar inestable. Se considera confirmada la EM cuando una resonancia magnética detecta más de nueve lesiones cerebrales; o más de tres en el cerebro y una en la médula.

- En el 80% de los casos se desarrolla en dos etapas; la primera, inflamatoria, presenta brotes y recuperaciones. La segunda es degenerativa. Cada brote deja una lesión, por eso el tratamiento busca disminuir al máximo la intensidad y la duración de los brotes, de manera que cuando el paciente llegue a la segunda etapa lo haga con la menor discapacidad posible.

- Se administran medicamentos muy específicos (interferones o anticuerpos monoclonales), que son muy costosos, pero que las obras sociales tienen la obligación de cubrir al 100%, igual que el resto del tratamiento: fisioterapia para rehabilitar las partes del cuerpo afectadas; apoyo psicológico, terapia ocupacional; otros medicamentos, como antidepresivos, etc.

- La tercera pata es la contención, al paciente y a la familia. Y en ese sentido, son muy importantes las asociaciones de pacientes y familiares, no solo porque funcionan como grupos de apoyo, sino porque permiten armar bancos de medicamentos, recaudar fondos para emergencias... y en definitiva, tener más fuerza para cualquier reclamo que sea necesario hacer.

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