03 Agosto 2012
CORRIENTES.- Una niña de 12 años fue sometida sexualmente por su padre, su padrastro y su abuelo, en reiteradas oportunidades. La noticia, que tomó difusión gracias a la denuncia realizada por las maestras de la víctima, conmocionó a la localidad de Esquina, situada en la provincia de Corrientes.
El primero en abordar a la menor fue su propio padre, que tiene alrededor de 40 años. El hombre la atacó en varias ocasiones dentro de la vivienda que compartían. Sin embargo, la pequeña no se había animado a contarle a nadie lo que venía padeciendo porque su agresor la había amenazado para garantizar su silencio.
Luego sus padres comenzaron a tener problemas de convivencia y decidieron separarse, por lo que el papá de la nena se fue de la casa. Pero la pesadilla de la pequeña no terminó allí. Poco tiempo después, la mamá de la víctima formó pareja con un hombre de 70 años, quien también solía abusar de la menor cada vez que se quedaban a solas.
Lo contó en la escuela
Otra vez, la víctima calló los abusos ante su madre. Pero un día no aguantó más y sugirió que estaba pasando por esa situación durante una conversación con una compañera de la escuela. Cuando esa información llegó a los oídos de las maestras, éstas indagaron a la alumna, que terminó revelando los abusos que sufría.
Ante el relato desgarrador de la niña, las docentes acudieron a la Justicia para denunciar los hechos, acompañadas por un Asesor de Menores. Además, mantuvieron una entrevista con la madre de la pequeña, quien se mostró sorprendida al escuchar lo que había contado su hija.
De manera inmediata, la menor fue examinada por un grupo de profesionales que constataron las lesiones sufridas. Asimismo, un psicólogo determinó que la niña no estaba fabulando, ya que fue clara y precisa al hablar de los ataques sexuales padecidos en el ambiente familiar.
El tercer hecho
Con estas pruebas, el juez de turno ordenó la detención de los abusadores; primero del padre de la niña y, días después, del padrastro. Este último no fue encontrado en su vivienda cuando los uniformados lo fueron a buscar, pero finalmente se entregó de manera voluntaria en el Juzgado de Instrucción.
Pese a que los dos agresores se encontraban tras las rejas, la menor volvió a ser sometida. Esta vez, de parte de su abuelo. El ataque ocurrió el domingo, cuando su madre la dejó al cuidado del hombre para ir a visitar a su ex marido a la comisaría. Al regresar, a la mujer le llamó la atención el comportamiento de la niña y, después de preguntarle varias veces, ésta le confesó llorando que había sido abusada por su abuelo.
Así fue que juntas se acercaron a la comisaría a denunciar el hecho y un médico de la Policía constató, una vez más, que la nena había sido violada. En ese momento se dispuso el arresto del hombre de unos 57 años, que fue alojado junto con su hijo en la misma dependencia policial. Los tres detenidos están acusados del mismo delito: abuso sexual con acceso carnal. (Especial)
El primero en abordar a la menor fue su propio padre, que tiene alrededor de 40 años. El hombre la atacó en varias ocasiones dentro de la vivienda que compartían. Sin embargo, la pequeña no se había animado a contarle a nadie lo que venía padeciendo porque su agresor la había amenazado para garantizar su silencio.
Luego sus padres comenzaron a tener problemas de convivencia y decidieron separarse, por lo que el papá de la nena se fue de la casa. Pero la pesadilla de la pequeña no terminó allí. Poco tiempo después, la mamá de la víctima formó pareja con un hombre de 70 años, quien también solía abusar de la menor cada vez que se quedaban a solas.
Lo contó en la escuela
Otra vez, la víctima calló los abusos ante su madre. Pero un día no aguantó más y sugirió que estaba pasando por esa situación durante una conversación con una compañera de la escuela. Cuando esa información llegó a los oídos de las maestras, éstas indagaron a la alumna, que terminó revelando los abusos que sufría.
Ante el relato desgarrador de la niña, las docentes acudieron a la Justicia para denunciar los hechos, acompañadas por un Asesor de Menores. Además, mantuvieron una entrevista con la madre de la pequeña, quien se mostró sorprendida al escuchar lo que había contado su hija.
De manera inmediata, la menor fue examinada por un grupo de profesionales que constataron las lesiones sufridas. Asimismo, un psicólogo determinó que la niña no estaba fabulando, ya que fue clara y precisa al hablar de los ataques sexuales padecidos en el ambiente familiar.
El tercer hecho
Con estas pruebas, el juez de turno ordenó la detención de los abusadores; primero del padre de la niña y, días después, del padrastro. Este último no fue encontrado en su vivienda cuando los uniformados lo fueron a buscar, pero finalmente se entregó de manera voluntaria en el Juzgado de Instrucción.
Pese a que los dos agresores se encontraban tras las rejas, la menor volvió a ser sometida. Esta vez, de parte de su abuelo. El ataque ocurrió el domingo, cuando su madre la dejó al cuidado del hombre para ir a visitar a su ex marido a la comisaría. Al regresar, a la mujer le llamó la atención el comportamiento de la niña y, después de preguntarle varias veces, ésta le confesó llorando que había sido abusada por su abuelo.
Así fue que juntas se acercaron a la comisaría a denunciar el hecho y un médico de la Policía constató, una vez más, que la nena había sido violada. En ese momento se dispuso el arresto del hombre de unos 57 años, que fue alojado junto con su hijo en la misma dependencia policial. Los tres detenidos están acusados del mismo delito: abuso sexual con acceso carnal. (Especial)
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