Tom Cruise se quedó sin fiesta ni esposa

Tom Cruise se quedó sin fiesta ni esposa

El actor pasará su cumpleaños triste, refugiado en el trabajo y alejado de Holmes y de su hija.

03 Julio 2012
Hasta ahora, Tom Cruise venía encontrando solución para todas sus preocupaciones. Si descubría algunas arruguitas avanzándole en la cara, mandaba a juntar excremento de ruiseñor para untarse y hacerlas desaparecer. Para evitar la dispersión en los rodajes, prohibía a sus compañeros que lo miraran directamente a los ojos. Y así. Pero con esto último no ha podido. Hoy, día en que el actor alcanza sus 50 años, parece estar más cerca de sentarse a llorar frente a las cajoneras vacías de Katie Holmes que de alzar una copa y brindar a su salud.

Triste, separado y señalado por todos los medios como "el raro de la pareja", Cruise quizás esté pasando por su cumpleaños más difícil. Más que en soplar las velitas o en el regalo ideal, ha de estar pensando en la mejor estrategia para que Holmes no se quede -como pretende- con la custodia exclusiva de Suri, su hija de seis años. Por lo demás, vivirá la fecha en Islandia, donde se filma su próxima película, y totalmente recluido en el trabajo.

Acerca del dinero
Conocido el pedido de divorcio por parte de Katie, a quien la devoción de Cruise por la Cienciología le parece peligrosa de tan exagerada, trascendió también la suma de dinero que él deberá pagarle: U$S 15 millones, teniendo en cuenta que el acuerdo prenupcial le da derecho a ella a U$S 3 millones por cada año de matrimonio. Esto sin contar la división de bienes, ya que la pareja es dueña de múltiples propiedades alrededor del mundo, cuyo valor total alcanzaría los U$S 275 millones.

Sin embargo, la mayor parte de estas casas pertenece a Cruise y, si Holmes recibe más dinero, será por la manutención de su hija. "Ella tendrá que demostrar que Suri tiene niñeras, autos, actividades, ropa y citas de peluquería. Suri necesita una cantidad considerable de dinero para mantener su estilo de vida", explicó Vikki Ziegler, abogada de Hollywood. Mientras los letrados debaten estas cosas, la actriz se refugia en su lujoso departamento de Nueva York con la única compañía de la niña. ¿Llamará a su ex para felicitarlo por el medio siglo?

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