Dos adolescentes jugaban con fuego en un árbol y causaron un incendio en una escuela

Los maestros estaban a punto de servir el postre a los chicos. De repente, alguien gritó que había humo en el techo. La mayoría de los docentes pensó que se trataba de humo en un árbol que está detrás de un aula. Pero estaban equivocados: en cuestión de segundos, el humo comenzó a salir por las ventanas y apareció el fuego dibujando lengüetas en el aire.

Desesperada, la vicedirectora Susana Palomino ordenó que sacaran a todos los chicos al patio. "El fuego crecía y no podíamos pensar en lo material; pensamos en lo humano, por eso sacamos a los chicos", explicó la máxima autoridad de la escuela N°16 de Balderrama, en Simoca.

La mujer estaba acongojada ayer mientras observaba las ruinas en las que había quedado el edificio escolar construido hace más de 70 años. "Había techos de chapa, pero los tirantes eran de madera y eso se prendió fuego muy rápido", precisó.

Los chicos corrían hacia la calle, mientras los docentes intentaban mantener la calma para tomar decisiones. "Había que tener la precaución de que no quedara ningún chico adentro del aula", dijo.

La escuela tenía un salón multiuso, seis aulas, la oficina de la dirección, de la vicedirección, la cocina y el baño del alumnado. "Todo se quemó", precisó la vicedirectora.

El docente Jorge Morales explicó que los chicos de tercer grado corrieron peligro de asfixia. "Fui a buscar un balde con agua, pero era muy alto, y el matafuegos no servía. Fue tan repentino que se expandió por todo el techo", dijo.

Dos días de trabajo

La vicedirectora anunció que las clases se suspenden por 48 horas. "En ese lapso, todos los maestros vamos a acondicionar otros dos salones independientes del sector que se quemó para que el lunes podamos volver a dictar clases", aseguró.

Por su parte, el jefe de Bomberos de Monteros, Carlos Rodríguez Mena, precisó que el fuego se inició por una travesura de dos adolescentes que prendieron fuego en un árbol y luego pasó al techo de la escuela. "Los daños son totales, porque había mucha madera en los techos", precisó.