Los olvidos se incrementan según pasan los años

El paciente J.M.G., de 62 años, llegó ansioso en busca de apoyo médico. Algunas fallas en la memoria lo ponían mal y decidió consultarle al neurólogo clínico, doctor Federico Pelli Noble. El especialista lo recibió en su consultorio, percibió su nerviosismo y lo invitó a tomar asiento. "Vamos a charlar un poco" le dijo, y comenzó a interrogarlo.

- Dígame ¿qué lo trae por aquí...?

- Tengo muchos olvidos, doctor, y esto me preocupa...

- ¿Qué se olvida, por ejemplo?

- A veces, los nombres de algunas personas a las que conocí hace poco. Otras, las actividades que tenía que hacer; o dónde guardo las cosas... Por ahí quedo con la mente en blanco: no sé qué iba a buscar, qué estaba por hacer o qué quería decir...

- ¿Son frecuentes?

- No llevo bien la cuenta, pero cuando estoy más ocupado, con mucho trabajo y asuntos por resolver, con presiones, nervioso y con pocas horas de sueño me parece que es cuando más olvidos tengo...

El doctor Pelli Noble lo tranquiliza y le informa que a medida que pasan los años la memoria suele jugarnos una mala pasada; que el mismo paso del tiempo tiene un efecto negativo en la capacidad de retención de la información. "Lo importante -le explica- es que usted llegó a la consulta solo (sin compañía), porque es consciente de sus olvidos. Esto es bueno, pero tengo que evaluarlo. Le pediré algunos estudios y pruebas cognitivas -que le hará una neuropsicóloga- para determinar cuál es el origen de sus olvidos. Regrese cuando tenga los resultados".

Después de despedir al paciente, el doctor Pelli Noble charló con LA GACETA sobre los trastornos de la memoria. Los olvidos, señaló, son una queja frecuente en toda la población y en todas las edades, aunque principalmente en los adultos mayores.

- ¿A qué se deben?

- La aparición de olvidos frecuentes puede ser producto del estrés, del envejecimiento normal, de la ansiedad, de la depresión o de la suma de muchas actividades, entre otros factores. Pero también pueden ser indicios de alguna de las enfermedades que afectan la memoria, como las cerebrovasculares, el Parkinson, el consumo de alcohol y de drogas, infecciones o tumores cerebrales, epilepsia, apnea del sueño, deficiencia vitamínica, hidrocefalia, la ingesta de ciertos fármacos y otros males neurodegenerativos, principalmente el Alzheimer.

- Entonces hay que descubrir la etiología, la causa...

- El diagnóstico es fundamental para un correcto tratamiento. Incluso en los cuadros que no son reversibles, una terapia adecuada frenará el deterioro rápido y progresivo de las funciones del cerebro, retrasará la aparición de los síntomas más severos de la demencia, el paciente extenderá su vida normal por más tiempo y mejorará su calidad de vida y la de su familia...

-Cuando se habla del paciente con deterioro cognitivo, ¿a quétipo de pacientes se hace referencia?

- Son los pacientes que presentan trastornos o fallas en la memoria, en el lenguaje, en las actividades cotidianas de la vida, en las conductas, en el comportamiento, sufren déficit de atención...

- ¿Es posible detectar en la primera consulta si un paciente tiene olvidos pasajeros o el inicio de alguna demencia?

- Hay dos tipos de paciente: el que asiste solo y el que llega acompañado. El primero es una persona preocupada pero consciente de sus problemas, que ve que sus actividades diarias han decaído un poco y concretamente sabe lo que le está pasando. El que llega en compañía de un familiar es un problema mayor. En los olvidos tenemos que determinar si forman parte del envejecimiento normal o si es el inicio de alguna enfermedad.

-¿A qué edad surgen los olvidos propios del envejecimiento?

- Después de los 60 años son frecuentes por diversos factores. Lo importante es saber que del 100% de las personas que consultan, el 60% no tiene nada. Lo confirman las pruebas neurocognitivas y neuropsicológicas que se les pide para evaluar las funciones del cerebro. Del 40% restante, un 20% sufre trastornos de depresión, de ansiedad, de desórdenes afectivos, pérdida de seres queridos, etcétera, que llevan a los olvidos. El otro 20% tienen causas orgánicas que relatan el inicio de una enfermedad, de algún tipo de demencia que tanto atemoriza a la gente, principalmente al Alzheimer. Pero hay otros males neurodegenerativos como la enfermedad de Huntington, de Wilson, demencia frontotemporal, de Lewy, parálisis supranuclear progresiva...

- ¿Todas comienzan con fallas en la memoria?

- No siempre comienzan con olvidos. También pueden manifestarse con cambios conductuales o del comportamiento, desorientación, confusión. Uno tiene que estar atento a estos cambios. En neurología tenemos una batería de estudios, de métodos de diagnóstico. Un hipotiroidismo severo, por ejemplo, puede provocar una alteración en la esfera cognitiva, un deterioro de la función cerebral. Debemos escuchar al paciente y estudiarlo para ver si es benigno o maligno. Pueden revertirse muchos cuadros de alteraciones de la memoria o de fallas en las funciones cerebrales, como los originados por un hipotiroidismo severo, hidrocefalia (que se opera) y algunos fármacos. Al suprimirlos retrocede el cuadro.