Messi se devoró a Real Madrid

Messi se devoró a Real Madrid

Le dio otra cátedra al "merengue"

SE VIENE LA GRAN DUPLA. Cesc Fábregas levanta a Messi después de que marcara el gol del triunfo. REUTERS SE VIENE LA GRAN DUPLA. Cesc Fábregas levanta a Messi después de que marcara el gol del triunfo. REUTERS
18 Agosto 2011
Por Sebastián Fest - DPA

BARCELONA.- Leo Messi se besó el escudo y a Iker Casillas sólo le quedó tragar saliva. El rosarino, imán para todo tipo de golpes, encaró a Marcelo, tras recibir una patada, y luego con José Mourinho. Combinó con Cesc Fábregas y Adriano para anotar su segundo gol del partido y terminar de devorarse a Real Madrid.

Messi, una vez más Messi, siempre Messi. Habilitaciones con precisión de estilete -por ejemplo la del primer gol, el de Iniesta-, compenetración absoluta con sus compañeros, velocidad, oportunismo y de las noches más sanguíneas que se le recuerden en un Camp Nou que hirvió por la asombrosa violencia que desplegaron muchos de los jugadores del Real Madrid, en especial el desconcertante Pepe y Marcelo, que se fue expulsado al final.

Imágenes de un partido que fue pura frustración paraCasillas, Marcelo, Mourinho y todo Real Madrid, que ya sabe que esta temporada tampoco podrá escaparle a su némesis, ese Barcelona que no se cansa de ganar. No se duerme, aunque lo hagan jugar en el insólito horario de las 23.

El cambio de ciclo es evidente en el fútbol español, porque con el título de ayer, los catalanes igualaron a Real Madrid en el conteo histórico de títulos, 75 para cada uno. Siete años atrás, los blancos les llevaban 12 de ventaja a los azulgrana, con los que nunca habían perdido una final de Supercopa.

Fue un partido diferente a los de la temporada anterior. Josep Guardiola plantó a los 11 hombres que salieron como titulares en la final de mayo por la Liga de Campeones en Wembley, mientras Mourinho decidió jugar con protagonismo y al límite, o más allá de él, en campo ajeno. Así, la intensidad fue la norma, en un partido, salvo la batahola final, para disfrutar por la tensión permanente y la inclaudicable decisión de ambas partes de ganar.

Vano consuelo para Casillas, que a esta altura debe estar harto de Messi. No hay ningún jugador que le haya hecho más goles (14) que el rosarino, que, a su vez, tiene en el cancerbero del Real Madrid casi un amuleto: a nadie le movió las redes tantas veces como al capitán de la selección española.

Congruente con la falta de fair play de su entrenador, los jugadores del Real Madrid se fueron de la cancha sin asistir a la premiación. Vicente del Bosque, el seleccionador español, vuelve a tener problemas en un grupo que hace poco más de un año ganó el Mundial. "Las imágenes hablan por sí solas, y poco más puedo añadir", dijo Guardiola, que teme que todo termine muy mal en los duelos entre su equipo y Real Madrid. Ojalá que no sea así.

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