09 Febrero 2011
La imagen principal de nuestra portada es impactante: muestra a la niña que escapó de un padrastero agresor junto a la religiosa del Hogar San José, que la recibirá. Los editores no tenían dudas acerca de la fuerza de la fotografía, pero uno planteó que se trataba de una información que se había publicado en nuestra tapa de ayer. "¿Decimos algo nuevo?", preguntó. "La novedad está en el encuentro entre la religiosa y la niña", explicó un periodista, que halló razonables las dudas acerca de la información. Pero el jefe de Fotografía salió a defender la foto: "antes hablábamos del dolor; ahora estamos hablando de alivio y alegría", dijo. El diagramador estuvo de acuerdo: "es la mejor foto que tiene todo el diario", definió. Con eso se definió la primera imagen. Para la segunda también hubo debate: el jefe de Fotografía proponía imagen de la práctica de la selección de fútbol, pero uno de los prosecretarios opinó que debía ser una del duelo Messi-Ronaldo. "Pero ese duelo está expuesto en el suplemento Deportes", objetó el primero. "Sí, pero es la información más interesante y así debería reflejarlo la portada", respondió el segundo. Eso obligó a modificar la tapa del suplemento Deportes. El tema central estaba claro: la información sobre la trata de personas.
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