Europa vive una "pesadilla blanca"

Europa vive una "pesadilla blanca"

Miles de pasajeros duermen en aeropuertos. La tormentas de nieve afectan a todo el sistema de transporte.

RUTAS REPLETAS. Graves embotellamientos en autopista A10, que llega a París. REUTER RUTAS REPLETAS. Graves embotellamientos en autopista A10, que llega a París. REUTER
20 Diciembre 2010
BRUSELAS.- La postal de la blanca Navidad de la que hablan los villancicos podría convertirse en blanca pesadilla para miles de pasajeros de la Europa del norte: quienes deban subirse a un avión entre hoy y el próximo jueves, horas antes de la Nochebuena, deberán armarse de paciencia y de bebidas calientes.

A pesar de que hoy amainó la tormenta de nieve que azota el Viejo Continente desde el jueves, algunos aeropuertos como el londinense de Heahtrow, el de Francfort o el parisino Charles de Gaulle, se preparan para una pre Navidad caótica.

Las imágenes retrotraen a las de abril pasado, cuando una nube de ceniza volcánica procedente del volcán islandés Eyjafjallajoekull retuvo en tierra a siete millones de pasajeros, produjo la cancelación de 20.000 vuelos, y dejó 180 millones de euros diarios en pérdidas: el mayor impacto negativo en la aviación europea desde los atentados de 11 de septiembre de 2001 en Estados Unidos.

Heahtrow, el aeródromo más importante en la Europa no continental recuperó hoy parcialmente su actividad, después de un fin de semana caótico. Debido a la peor nevada registrada en el Reino Unido en varias décadas, miles de pasajeros pasaron la noche en sus terminales y numerosos vuelos fueron desviados a otros puntos, entre ellos Bruselas.

La autoridad aérea británica (BAA) lanzó esta tarde un mensaje poco esperanzador: el caos aéreo en la isla británica podría durar hasta Nochebuena e incluso prolongarse hasta fin de año. Según este organismo, hasta el mediodía sólo pudo operar un tercio de los vuelos programados.

En Bélgica la situación fue compleja: las autoridades de su principal aeropuerto internacional, el de Zaventem, se quedaron sin el líquido anticongelante indispensable para volar con temperaturas extremas (de 50 grados centrígrados bajo cero o menos) y suspendieron los vuelos hasta el miércoles.

En Francfort la situación no era mejor: Cientos de personas se vieron obligadas a pasar la noche en el aeropuerto de esa ciudad, luego de que se anularon unos 300 vuelos. En toda Alemania se produjeron retrasos en el transporte ferroviario y grandes embotellamientos en las principales rutas.

Los aeropuertos parisinos de Orly y Charles de Gaulle comenzaron a funcionan hoy de nuevo luego de cierres temporales causados por la ola de frío. La empresa encargada de la administración de las terminales advirtió sin embargo de que seguirá habiendo retrasos.

Más de 3.000 personas tuvieron que pasar la noche en Charles de Gaulle, el principal aeropuerto de Francia, debido a la cancelación de cientos de vuelos el domingo por el hielo y la nieve.

A pesar de que las autoridades alemanas, francesas, británicas u holandesas recomiendan usar el tren o el autobús, en lugar del avión, numerosas líneas sufren fuertes retrasos, entre ellos el tren de alta velocidad Thalys, que une Bruselas con París, Londres y Ámsterdam. (DPA)

Tamaño texto
Comentarios
Comentarios