02 Agosto 2010
MOMENTOS DE TERROR. Cano cree que los delincuentes vigilaron su casa. LA GACETA/JORGE OLMOS SGROSSO
La familia de Ramón Santiago Cano, presidente del Concejo Deliberante de la capital, fue víctima de un violento asalto a mano armada esta mañaña. El hecho ocurrió alrededor de las 9.30, en una vivienda ubicada en el barrio Feput, mientras el edil oficialista se encontraba en una reunión en la sede del Concejo.
Cano contó a LA GACETA que cuatro delincuentes irrumpieron en su casa, donde estaban su cuñada Mónica Suárez, su nuera y su nieto, de cuatro meses. Los ladrones (uno de ellos se quedó vigilando la puerta) golpearon a las mujeres y encañonaron al pequeño, que en ese momento dormía. "Aparentemente buscaban dinero, porque revolvieron toda la casa", señaló.
Luego de inspeccionar a fondo, los desconocidos ataron a las mujeres y se marcharon. Se llevaron una notebook, dos celulares y $ 200. Cuando se le preguntó si creía que los ladrones conocían de quién es la casa, Cano contestó que sí.
"Deben habernos vigilado. De todos modos, no es un barrio inseguro. Fue un momento tremendo, nunca pensé vivir algo así. Lo único que quiero es que mi familia esté bien", expresó el edil, evidentemente nervioso. El hecho conmocionó a los ediles, que se encontraban con Cano cuando recibió el llamado que lo advirtió de la situación. LA GACETA ©
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