15 Julio 2010
DAÑO. La caña de azúcar sintió el impacto de las bajas temperaturas.
Los principales cultivos de nuestra provincia volvieron a afrontar ayer una madrugada de con temperaturas inferiores al cero grado centígrado por varias horas. El Observatorio Meteorológico del INTA Famaillá registró ayer a la intemperie tres horas de -4,2º centígrados en superficie, -7º a cinco centímetros de altura durante cuatro horas y -2,6º centígrados a 1,5 metro, en un lapso de tres horas. Los cultivos que ya presentan daños a causa de las bajas temperaturas son el arándano, la caña de azúcar y el limón. Para el viernes, el sábado y el domingo se esperan las heladas más intensas de la temporada, según insistió Juan Rubén Pedraza, técnico del Observatorio.
"Como ya venimos mencionando, los registros más bajos se están produciendo hacia el este y el sur de la provincia. Hemos iniciado un relevamiento de daños, que suponemos que estará concluido el lunes", dijo Pedraza a LA GACETA.
En el arándano, los efectos de las heladas tienen mayor o menor impacto según el avance del cultivo y de acuerdo con las tareas o tecnologías que se aplican para combatir las bajas temperaturas. Las plantas "primicia" que ya exhiben floración o botones florales son las que más riesgo corren de perderse.
"La helada que cayó el martes, de entre los -2º y -4º centígrados, afectó a los arándanos que no tenían protecciones antiheladas y las variedades de la nueva genética, que son de gran primicia", reveló el productor de arándanos Francisco Estrada. "Los campos que disponen de algún sistema de aspersión anduvieron bien y se podrían cosechar con tranquilidad. En mi caso particular, tengo un campo con arándanos en Concepción que presenta una parte con daños y otra sin problemas", destacó. Estrada sostuvo que los métodos para combatir heladas con fuego o con humo sólo tienen utilidad frente a heladas de baja magnitud. "Pero ahora estamos hablando de un frente de frío polar, que ataca desde abajo y desde arriba, con lo cual las soluciones son más limitadas", añadió.
Pedraza remarcó que las heladas también podrían haber afectado a los zapallitos y a otras hortalizas de hoja, y aclaró que las frutillas se desarrollan casi en su totalidad bajo cubierta, de manera que, por ahora, podrían haberse salvado de los efectos de las bajas temperaturas. Aclaró, sin embargo, que cualquier cultivo de frutillas que se llevara adelante a la intemperie ya se debe haber perdido.
Avance de cosecha
En la actividad azucarera cunde la incertidumbre y el temor ante los posibles efectos de las heladas en la caña de azúcar. Sin embargo, hay en principio la idea de que el avance de la cosecha de la materia prima del azúcar se llevó a cabo justamente con prioridad en las zonas con mayores riesgos de heladas. "El avance de la cosecha en la zona este es importante, de manera que creemos que se pueden reducir los efectos de las heladas", opinó el cañero Bernabé Alzabé.
Por su parte, el presidente de la Asociación Tucumana del Citrus (ATC), Roberto Sánchez Loria, dijo que hasta el momento el régimen de heladas "no es tan fuerte y no han sido tan intensas por lo que no esperamos el daño por ese lado; ha habido bajas temperaturas por tiempo prolongado".
"Como ya venimos mencionando, los registros más bajos se están produciendo hacia el este y el sur de la provincia. Hemos iniciado un relevamiento de daños, que suponemos que estará concluido el lunes", dijo Pedraza a LA GACETA.
En el arándano, los efectos de las heladas tienen mayor o menor impacto según el avance del cultivo y de acuerdo con las tareas o tecnologías que se aplican para combatir las bajas temperaturas. Las plantas "primicia" que ya exhiben floración o botones florales son las que más riesgo corren de perderse.
"La helada que cayó el martes, de entre los -2º y -4º centígrados, afectó a los arándanos que no tenían protecciones antiheladas y las variedades de la nueva genética, que son de gran primicia", reveló el productor de arándanos Francisco Estrada. "Los campos que disponen de algún sistema de aspersión anduvieron bien y se podrían cosechar con tranquilidad. En mi caso particular, tengo un campo con arándanos en Concepción que presenta una parte con daños y otra sin problemas", destacó. Estrada sostuvo que los métodos para combatir heladas con fuego o con humo sólo tienen utilidad frente a heladas de baja magnitud. "Pero ahora estamos hablando de un frente de frío polar, que ataca desde abajo y desde arriba, con lo cual las soluciones son más limitadas", añadió.
Pedraza remarcó que las heladas también podrían haber afectado a los zapallitos y a otras hortalizas de hoja, y aclaró que las frutillas se desarrollan casi en su totalidad bajo cubierta, de manera que, por ahora, podrían haberse salvado de los efectos de las bajas temperaturas. Aclaró, sin embargo, que cualquier cultivo de frutillas que se llevara adelante a la intemperie ya se debe haber perdido.
Avance de cosecha
En la actividad azucarera cunde la incertidumbre y el temor ante los posibles efectos de las heladas en la caña de azúcar. Sin embargo, hay en principio la idea de que el avance de la cosecha de la materia prima del azúcar se llevó a cabo justamente con prioridad en las zonas con mayores riesgos de heladas. "El avance de la cosecha en la zona este es importante, de manera que creemos que se pueden reducir los efectos de las heladas", opinó el cañero Bernabé Alzabé.
Por su parte, el presidente de la Asociación Tucumana del Citrus (ATC), Roberto Sánchez Loria, dijo que hasta el momento el régimen de heladas "no es tan fuerte y no han sido tan intensas por lo que no esperamos el daño por ese lado; ha habido bajas temperaturas por tiempo prolongado".
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